Nuestra piel no sólo nos protege del medio ambiente, sino que cumple la función de hidratar los órganos internos, es por esto que la importancia de cuidarla no sólo responde a un factor estético, sino que a uno relacionado con la salud.
La cosmetóloga y masoterapeuta del Acqua Spa del Hotel Radisson Concón, Claudia Gálvez, asegura que durante los meses de más frío "la auto protección de la piel disminuye significativamente ya que el ambiente árido que se forma en los espacios con calefacción hace que la piel se reseque. Esto hace que necesitemos hidratación extra en las capas superiores".
Para poder limitar el daño a la piel durante el invierno la especialista entrega algunos tips.
La temperatura del agua es muy importante, pues la ducha no debe ser caliente, sino que tibia ya que el agua a temperaturas muy altas daña las capas protectoras de la piel.
Por otro lado el secado de la piel tiene que ser delicado, ya que para eliminar el exceso de agua la recomendación no es refregarse con una toalla, sino que dar pequeñas palmaditas a lo largo del cuerpo con esta.
Los labios también requieren especial atención ya que están siempre expuestos y son sumamente frágiles, esto gracias a su estructura lipídica y que no contienen sebo, lo que hace que no tengan protección natural ante el frío. Para evitar grietas, despellejamiento y otros problemas, la solución es utilizar labiales hidratantes y re-estructurantes.
Además la limpieza de cutis debe ser diaria. No obstante, conviene elegir productos suaves que no dañen una piel ya castigada por las bajas temperaturas que se aproximan. J