Delincuencia desbordada
La delincuencia se desborda y seguimos desperdiciando la democracia. Cantidad de casos suman y que no llegan a conocimiento ni de la autoridad, ni de estadísticas, pero sabemos que es alarmante.
Una vez más el gobierno y la clase política demuestra su ineptitud y fracaso junto especialmente a las instituciones encargadas y responsables de generar y aplicar la ley, ello en buen chileno se llama pantalones; al parecer estamos enredados en mucha teoría y perfeccionismos, vamos a lo práctico que estamos fracasando día a día.
Si no corresponde pedir la participación de las Fuerzas Armadas, o plantear un estado de sitio, tal vez haya que considerar la posibilidad de solicitar ayuda internacional, pues de frente y a la cara, ¿quién para esto?
Señores, el pueblo está cansado, exige y desea vivir en paz.
José Manuel Caerols Silva.