LA ADMINISTRACION DEL CAMBIO
A todos, sin excepción, debería importarnos la contingencia y comprender lo que está sucediendo socialmente con nuestro país y en particular en nuestra región. Quisiera destacar un concepto que aunque parezca lejano a nuestra coyuntura social, resulta hoy en día de una importancia crítica y que no podemos seguir descuidando. Este concepto es la "Administración del cambio", proviene del campo del desarrollo organizacional y es aplicable a pequeños grupos, empresas, regiones o países como un todo.
La administración del cambio es un conjunto de acciones claves al momento de querer modificar los procesos y reestructurar los resultados de un grupo, elaborándose herramientas y técnicas para lograr administrar, desde las personas, el cambio necesario para lograr resultados diferentes.
La administración del cambio considera tres factores críticos; (a) una adecuada planificación, (b) la construcción de confianzas y (c) la integración mayoritaria de los involucrados. De no desarrollarse de buena forma cada uno de estos tres factores, se corre el riesgo de fracasar en el objetivo de implementar exitosamente un cambio.
A la luz del análisis que hiciera la Presidenta la semana pasada y de los recientes cambios en la conducción del gobierno regional, resulta clara la necesidad de invertir en un buen proceso de administración de los cambios. Me refiero a los cambios promulgados en tributación, educación escolar y a los anunciados en educación superior, materia laboral y constitucional, por mencionar los mas relevantes.
Debemos ser capaces de planificar en detalle las implicancias, los plazos y los recursos necesarios para cada uno de los cambios, de lo contrario se inicia un camino de confusión e incertidumbre. Por otra parte, debemos construir confianzas entre el mundo político, el empresarial, el gubernamental y el gremial, no es posible avanzar con desconfianzas. En paralelo, debemos incorporar en el diseño de los cambios a la mayoría de los actores sociales, abandonemos las visiones confrontacionales y excluyentes entre actores públicos y privados, entre sectores políticos, entre empresarios y trabajadores. Insisto, solo implementando una buena administración del cambio, lograremos que este proceso llegue a buen término.