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Jorge Inostrosa: El desarrollo de una población que quiere dejar atrás el estigma social

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Cuando corría el año 1964, diez familias llegaban a poblar un terreno ubicado en el sector norte de Iquique. Se trataba de la población "John Kennedy", que gracias a la autorización del intendente de ese entonces, Luis Jaspar, pudo ser habitada a través de tomas por familias que llegaron desde la pampa y del sur del país.

Después de nueve años la población "John Kennedy" pasó a nombrarse "Jorge Inostrosa" luego de un decreto firmado el año 1973.

Poco a poco, estas 10 primeras familias fueron creciendo y la población se fue desarrollando gracias a los mismos vecinos, quienes motivados por tener una mejor calidad de vida, se organizaron y conformaron la primera directiva vecinal.

Francisco Márquez, Estéban Guzmán y Palmarino Lizama fueron los primeros dirigentes que lucharon por mejorar el sector en el que vivían.

"Fueron los primeros dirigentes que se formaron para fortalecer la población en sí. En esos tiempos, cuando yo era niña, trabajaban unidos, trabajaban todos por una misma razón, y una de las primeras luchas que ganaron fue tener agua", contó Alicia Naranjo, actual presidenta de la junta de vecinos e integrante de una de las primeras familias que llegó a vivir ahí.

"Gracias a ellos, nos vinieron a instalar pilones de agua. Ahí, con una manguera colocábamos nuestros tambores y así teníamos agua en nuestras casas", recordó.

La antigua vecina rememoró que en esos años existía un solo negocio de barrio llamado "La señora Pepa", tal como era conocida su dueña. "Este negocio ya no existe, pero era el único que había en ese tiempo. Y cuando éramos niños, y como no había electricidad, íbamos con velitas a comprar pastillas y de ahí nos íbamos corriendo a las casas".

Las canteras eran las piscinas naturales que los niños usaban para entretenerse en verano, y hoy son pobladas por los vecinos de la población "Carol Urzúa".

Los años pasaron y la siguiente lucha fue instalar el sistema de alcantarillado y ahí fueron más pobladores los que se unieron y ellos mismos hicieron la zanja para tener este servicio.

"Ya teniendo el alcantarillado vino el trabajo para contar con luz en la población, ya que tuvimos un incendio grande donde perdieron la vida dos lactantes a causa del uso de velas. Por eso hablamos con la gente del ferrocarril para que nos ayudaran", comentó Naranjo.

La dirigenta incluso contó, que luego de conformar la directiva y de luchar por el desarrollo del sector, la primera sede vecinal que tuvieron, fue un vagón de tren.

actualidad

Los años pasaron y hoy la población "Jorge Inostrosa", de nacer con 10 familias, actualmente cuenta con más de dos mil.

Sus antiguos vecinos recuerdan con nostalgia aquellos tiempos en que la unión entre pobladores era más fuerte que hoy, pero de igual manera destacan la preocupación y el cuidado que se tienen entre ellos, o al menos entre los más antiguos.

Es el caso de Mónica Olguín, quien llegó junto a su familia en 1965 y recordó cómo era la vida en la población. "La gente empezó a llegar de a poquito, había una buena convivencia pero ahora eso no se mantiene. Antes todos trabajábamos por un mismo objetivo en beneficio de la población, nos juntábamos en cualquier parte para ver qué hacíamos por el sector", recordó.

estigma social

Pero la lucha por el desarrollo y el mejoramiento de la calidad de vida de la población hoy se ve contrastada por una nueva lucha, como es quitarse el estigma social de que en dicha población solo existe delincuencia. "Nosotros nos sentimos desilusionados porque nos tienen de esa forma estigmatizados, porque acá tenemos jóvenes bien sacrificados, que han sacado su título universitario gracias al esfuerzo de sus familias", dijo Olguín.

"Tenemos un chico que es universitario y trabaja aquí con los niños del sector y fomenta el deporte, entonces no pueden decir que hay puros delincuentes", agregó.

Para los miles de vecinos que viven en la población "Jorge Inostrosa", el crecimiento de su sector es muy importante. Sin embargo, luego de 51 años de vida, ahora quieren luchar por terminar con la discriminación que existe por vivir ahí, demostrando que el desarrollo de un lugar no es por la construcción de modernos edificios, sino que por el trabajo en conjunto de los pobladores por mejorar la calidad de vida de sus familias. J