La situación de las caletas de la región en materia de protección civil es preocupante. Esto de acuerdo a un informe emanado de la Oficina Nacional de Emergencia (Onemi) que reconoce deficiencias en las islas de seguridad, en cuanto a infraestructura y al abastecimiento de éstas.

Esta realidad quedó en evidencia tras el terremoto de Coquimbo, el pasado 16 de septiembre, cuando los sistemas de alerta de tsunami fallaron en algunos puntos, sumado a los problemas de las islas (refugios en caso de emergencia) denunciados por los propios vecinos.

A raíz de este hecho, el diputado RN Cristián Monckeberg solicitó información vía transparencia a la Onemi sobre el funcionamiento de estas islas y sirenas.

En un oficio fechado el 27 de octubre y firmado por el director nacional (s) de la Onemi, Andrés Ibaceta, se establece que el sistema de sirenas falló, pero las deficiencias fueron subsanadas el 21 de septiembre, en presencia de los mismos dirigentes.

En relación a los refugios afirma que el proyecto no se formuló bajo los estándares de la Onemi, para lo cual solicitó apoyo a la directora provincial de Protección Civil de Iquique, "para que se formule un nuevo proyecto participando Onemi como institución técnica".

Finalmente con respecto al reabastecimiento de las islas, señala que son de propiedad del Gobierno Regional, "por lo que Onemi no tiene recursos ni facultades para reponer el stock".

Un problema que persiste, según explicó la presidenta de la junta vecinal de la Caleta San Marcos, Jacinta Acuña, quien solicitó su reparación. "Se le ha pedido a Onemi, he mandado cartas, he mandado correos y no tengo respuesta", dijo la dirigenta, quien agregó que el acceso a estos refugios es la mayor dificultad. "Por donde hay que pasar es oscuro, no hay ninguna señalética, ninguna luz que brille en la noche para subir a islas de seguridad", reclamó.

En relación al abastecimiento de los refugios afirmó que "no se ha renovado nada... estas lluvias que fueron en agosto, yo pasé todos los colchones, el único que tengo está con hongos porque hasta la isla se mojó, los alimentos los voy a botar porque están todos vencidos".

Estos hechos para el diputado Monckeberg dan cuenta de una descoordinación entre el Gobierno Regional, la Onemi y la Oficina Provincial de Emergencia. "Se echan la culpa unos a otros y no hemos aprendido nada de los últimos terremotos y tsunamis... Debería ser una llamada de atención, para tener un sistema que funcione a la perfección porque acá hay en riesgo vidas", afirmó el parlamentario, quien enfatizó que en la región nadie se hace responsable del sistema. J

La encargada provincial de protección civil, Arlette Irarrázaval, explicó que las alarmas y las islas son un proyecto de la administración anterior, cuyo dueño es el gobierno regional.

Aseveró que el problema del proyecto es que no se entregó a ningún organismo para que se hiciera cargo, con lo cual surgió el problema de la mantención.

"Hay muchas cosas de las islas de seguridad que fueron usadas en el terremoto del año pasado, en el proyecto no estaba contemplado, qué pasa si es que se usan las cosas si hay una emergencia, pero ese es un problema de diseño, como no fue entregado no hay una mantención", dijo la profesional

Añadió que el exgobernador Gonzalo Prieto solicitó a la Onemi vía oficio un estudio de las alarmas e islas de seguridad y un informe con las posibles acciones a tomar. La Onemi habría respondido que les colaboraran a desarrollar un proyecto para subsanar las deficiencias. J