Personas con habilidades especiales se sumaron a la PSU
A sus 19 años, Oscar Lizana decidió rendir la Prueba de Selección Universitaria (PSU), reto que concluyó ayer luego de someterse a dos días de exámenes.
El estudiante de electricidad del Liceo Politécnico José Gutiérrez de la Fuente posee necesidades educativas especiales derivadas de autismo y fue una de las más de cinco mil personas que se inscribieron para dar la PSU en la región.
En su primera experiencia para dar esta prueba, la aspiración de Lizana es lograr el puntaje que le permita estudiar alguna carrera universitaria relacionada a matemáticas, electricidad o computación.
Para ello acudió al liceo Bernardo O'Higgins donde, tras gestiones ante el Demre, tuvo las facilidades de que le asignaran una sala exclusiva para desarrollar las evaluaciones en compañía de su psicopedagoga Vanessa Guerrero.
"Estaban muy variadas las preguntas, así que lo que se me hizo más difícil fueron las que no me sabía, no me sabía varios procedimientos. En Lenguaje me fue mejor", contó Lizana.
Tanto el lunes como ayer, la psicopedagoga cumplió con la misión de orientarlo en las instrucciones para poder desarrollar la prueba.
"Ha sido súper reconfortante acompañar a Oscar en este proceso, lo vengo acompañando en el proyecto de integración de hace algunos años y el decidió ahora dar la PSU", expresó.
Guerrero refirió que no es habitual que alumnos con necesidades educativas especiales tengan la oportunidad de rendir la PSU, pero "ahora ya se están incorporando algunos criterios de evaluación como en este caso que se permitió que yo pueda asistir durante el examen".
La asignación de una sala exclusiva para el estudiante fue para evitar que reaccione con nerviosismo o se distraiga, dado que el liceo donde tuvo que asistir para someterse a la evaluación no era el ambiente al cual él está acostumbrado.
"Por lo general nuestros alumnos con necesidades educativas especiales derivadas del autismo están acostumbrados a una estructura y espacio cotidiano (...) para ellos no es fácil (el examen) por el lenguaje que se utiliza en la PSU pero a Oscar le fue bien", remarcó al destacar la rigurosidad en el estudio que posee Lizana.
Así como este estudiante iquiqueño, en esta edición de la PSU se brindaron facilidades a la joven María Graciela Valenzuela quien posee discapacidad auditiva. Ella ingresó a rendir la prueba acompañada de una intérprete de señas y, al igual que Lizana, le correspondió acudir al liceo Bernardo O'Higgins.
Según comentó el encargado del examen en dicho establecimiento, Rodolfo Sarabia, en el caso de Valenzuela, la joven decidió incorporarse en una sala junto a otros estudiantes y pudo desarrollar la prueba sin mayor problema. J