Nuestra ruralidad
Un tema destacado por la prensa nacional ha sido la disputa por los límites que Chile tiene con nuestros vecinos bolivianos, que se incrementa con hechos como los ejercicios militares en la región.
Pero, existe otra importante temática vinculada, la cual nunca aparece en la prensa o en los discursos oficiales, y son las personas que viven en las diversas localidades rurales de la provincia del Tamarugal.
¿Por qué ocurre lo anterior?, sería interesante tener una respuesta que justificara lo anterior. Por otra parte, ¿no es contradictorio que respecto de territorios en donde se está ratificando la soberanía, sea tan poco lo que el Estado realice para mejorar la calidad de vida de sus habitantes?
Un dato relevante, es que nuestra región posee una de las mayores concentraciones urbanas del país cercana al 94% según el Censo del 2002.
Otro antecedente importante es que, en la actual Estrategia de Desarrollo Regional, la agricultura local (actividad realizada por la mayoría de los habitantes del sector rural) no ocupa más de un par de líneas en este documento.
Por último, en la última entrega de subsidios para investigación de los proyectos FIC regionales, la agricultura no obtuvo ningún recurso para apoyar un incremento en su productividad y una mejora en los ingresos de quienes viven en estos sectores.
¿No será hora que los diversos estamentos políticos y autoridades de la región, de una vez, consideren la importancia de nuestra ruralidad?, apoyándola no sólo con distantes discursos, sino con ayudas efectivas, sobre todo porque sería una acción que estaría, después de mucho tiempo, ratificando la soberanía sobre un territorio cada vez más abandonado y lejano a las decisiones altamente centralizadas que se toman tanto en Santiago como en Iquique.