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Durante el verano es común ver a personas caminando en la playa con su perro y viajando en auto con la mascota. Algunos optan por irse de vacaciones con sus animales y aunque cuenten con la compañía de su amo, los animales pueden experimentar ciertos problemas al estar lejos de su hogar.
"Los gatos son altamente territoriales, por lo que estar fuera de su entorno habitual puede resultar estresante, porque significa dejar el territorio al que ya están vinculados, donde ya han dejado marcas en sus lugares favoritos. Por su parte, el perro también debe pasar por un proceso de adaptación y mantener sus rutinas y horarios, tanto para alimentación, hacer sus necesidades y realizar ejercicio", indica Astrid Standen, médico veterinaria de Royal Canin.
El transporte
La experta indica que el animal debe ir dentro de una jaula especialmente diseñada para él cuando se realice el viaje. Si es un perro mediano o grande, debe ir con un arnés con dos puntos de sujeción a los cinturones de seguridad de los asientos posteriores. Esto evita que el animal perturbe la conducción del vehículo, y es una protección en caso de accidente.
Además, si el viaje es largo se recomienda hacer paradas cada dos horas para que la mascota pueda hacer sus necesidades y estirar sus patas.
Standen explica que quienes van a la playa "deben evitar que el animal camine por la arena bajo el sol, ya que ésta emite altas temperaturas y puede causar serias quemaduras en las almohadillas de las patas. Esto se aplica también a otras especies".
LA COMPAÑÍA
Las mascotas deben llevarse en jaulas o sujetas con un cinturón de seguridad al ser transportadas pero siempre deben estar acompañadas. Nunca se debe llevar un animal en el maletero, ya que puede haber calor excesivo y mala ventilación o puede sufrir un shock térmico con graves consecuencias que le pueden causar hasta la muerte.
