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En el agro cuentan los secretos del mejor "melvin" en su día

La combinación de la fruta dulce con el vino blanco es una tradición sureña que de a poco comenzó a tener protagonismo en el norte de chile y que desde el año pasado cada 15 de enero se condisera como el "Día Nacional del Melón con Vino".
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Maycol Soto Rivera

Desde el año pasado que el día 15 de enero se conmemora como el "Día Nacional del Melón con Vino". Esta tradición que comenzó en el sur de Chile ha tenido una evolución y se considera como uno de los tragos típicos chilenos.

Si bien es cierto, el ahora conocido "melvin" comenzó en el sur de Chile y en Iquique no pasada desapercibido, pues claro si en el norte del país el calor es una característica con la que día a día deben lidiar las personas, un melón con vino helado viene como anillo al dedo o al menos así lo cree Fernando Castillo.

"Con este calor el melón con vino ahí en la playa es amado. Creo que en Santiago lo celebrarán mañana (hoy), al menos yo con la familia también porque nos iremos de paseo a la playa. Compramos hartos melones así que nos vamos a pasarla bien lejos de la ciudad".

Fernando, no es el único que tenía en mente disfrutar de la fruta dulce ya que toda su familia pidió expresamente comprar los melones.

"A mí me gusta tomar pero esto no es para mí, porque me lo pidieron los otros, mis hijos, mi señora, mis suegros así que todos nos borraremos hasta el domingo", comentó el padre de familia en tono gracioso.

Los clientes no son los únicos que se divierten con el melvin, puesto que los vendedores de este producto también tienen sus distintas historias con el popular trago.

"Los melones vienen desde el sur, algunos del norte, todos son diferentes pero con el melón tuna se debe tomar el melón con vino ese le da el toque. Toda mi vida he tomado el melón con vino, es algo muy clásico y solo puedo decir a la gente que no pateen a la perra", comentó Ricardo Naveas quien trabaja como vendedor y cargador en el sector del Terminal Agropecuario de Iquique.

Preparación

En cuanto a la preparación de la apetecida fruta, no tiene tantos ingredientes como otros tragos nacionales o extranjeros. En este sentido solo se necesita un melón, sin embargo el primer paso para beber con gusto de la fruta es elegir el mejor melón, así lo explicó Boris Ponce, quien trabaja como vendedor de frutas en el sector del terminal.

"El primer paso es escoger la fruta y para eso se necesita tener una buena nariz. Los mejores melones te dan ese aroma rico a melón, ahí significa que está listo, está maduro", dijo Ponce.

Luego en el segundo paso se practican los cortes precisos.

"Acá hay que hacer un hoyo al melón. En la punta se le hace un agujero y después con la cuchara se comienza a raspar un poco", explicó el vendedor.

Ponce con erudición explica que el tercer paso "es el más importante porque acá se le echa el vino y se queda en el proceso de "reposo", para que se concentre el vino con lo dulce del melón. Recomiendo que sea al menos 24 horas, pero muchos lo hacen el mismo día, sirve pero entre más esté en reposo es mejor".

Y luego el cuarto paso es el mejor, disfrutar del del melón con el vino. No obstante, Ponce dijo que los vinos deben ser expresamente de botella.

"Nada de cajas, esos vinos lo menos que tienen es vino. Siempre en botella eso si lo recomiendo", explicó el frutero.

Por otra parte, hay personas que agregan otros ingredientes a la preparación. Es el caso de Verónica Román. "El melón con vino es rico, quita la sed. El melón debe estar madurito y me gusta un vinito blanco seco. Me gusta el Exportación con el melón y le pongo un poco de canela molida, queda con otro sabor o un poco de menta molida o albahaca molida, eso lo aprendí de la gente del campo, queda con otro sabor muy rico", explicó Román quien reconoció que no bebe melón con vino desde el año pasado pero que este fin de semana hará un paseo familiar a la playa y llevarán más de 10 melones para capear el calor.

Tomó después de 5 años

La tradición del melvin ha pasado por generaciones, sin embargo a veces por las cosas de la vida el trago queda de lado, es el caso de Jorge Alonso Lagos que comentó que hace cinco años no tomaba melón con vino y que sus mejores recuerdos del trago eran con la familia en las playas lejanas de Iquique, no obstante ayer el iquiqueño logró romper los años de sequía y con toda confianza volvió a sentir el sabor dulce del trago.

"Estaba muy bueno, tenía que haber hecho esto antes de verdad que estuvo muy rico. Le faltó un poco de reposo pero como lo hicieron todo acá se entiende pero de verdad que está muy bueno", dijo Lagos.

Cada 15 de enero cientos de chilenos comparten este trago ya tradicional. Su popularidad es solo comparable al "terremoto", pero tiene la diferencia que no es un trago personal, es para compartir pues se disfruta en grupo.

"Toda mi vida he tomado el melón con vino, es algo muy clásico."

Ricardo Naveas, vendedor

"Le pongo un poco de canela molida, menta o albahaca, tiene otro sabor"

Verónica Roman.

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