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Los enredos no cesan en el Manchester City de Manuel Pellegrini, que ayer apenas consiguió empatar 2-2 como visita frente al West Ham y quedó a tres puntos del Leicester, que aseguró su liderato tras golear al Stoke City.

El cuadro del ingeniero sufrió la arremetida del dueño de casa. A los 50 segundos el West Ham ya anotaba un tanto gracias al ecuatoriano Enner Valencia y un error en el mediocampo de los "Ciudadanos".

Pero la respuesta llegó ocho minutos después. El argentino Sergio Agüero fue víctima de una falta que derivó en penal. El "Kun" contestó con sutileza y claridad a la diestra de arco rival y decretó la igualdad.

El resto del encuentro se debatió entre los esfuerzos infructuosos del City y el fuerte ataque del West Ham. Apenas se vio el resultado de esta pugna en el complemento.

Nuevamente los errores del elenco de Pellegrini permitieron el desequilibrio del partido. A los 55 minutos, la falla de Nicolás Otamendi cedió terreno para que Valencia se adjudicara el segundo gol.

Cuando parecía que el City se iría con una derrota, vino un extraño y discutido gol del "Kun", que surgió producto del pase del nigeriano Kelechi Iheanacho. La anotación casi fue anulada, pero permitió al City ganar en la agonía y sumar 44 puntos en la tabla de la Premier, a la espera de lo que hará hoy el Arsenal frente al Chelsea.