La actual crisis minera abre un abanico de coyunturas para la diversificación de los ideales de nuestro país.
Es en este punto, donde nos preguntamos si seguiremos siendo un país exportador de materias primas, que dependa de valores externos de producción o un país exportador de innovación.
El doctor y conductor del programa Cosmos de Natgeo, Neil Degrasse, habló sobre la necesidad de crear Ciencia en Chile, abriendo el debate sobre la necesidad de un Ministerio de Ciencia, que duerme como proyecto hace más de un lustro.
Sabemos que este desarrollo debe ir acompañado de institutos científicos regionales, donde se abarquen las necesidades locales.
Surge la interrogante que debe ser fundamentada por los integrantes del capital humano chileno que se dedica a la generación de conocimiento: por qué deben destinarse grandes fondos a la ciencia, cuya respuesta parece estar asociada a la cantidad de patentes, publicaciones y premios que se generan en base a la inversión, la cual distingue a un país de carácter rentista de uno productivo.
Corea del Sur, hace 45 años, era dependiente de la agricultura con un PIB destinado a Ciencia de tan solo un 0,5 %. En los '70, el país creció de la mano del incremento destinado a Innovación y Desarrollo, mediante el nacimiento de empresas pequeñas relacionadas con la tecnología -hoy en día denominadas startup- las cuales recibían capital de inversores privados a cambio de pertenecer en un pequeño porcentaje a las acciones del modelo empresarial.
Con la creación en los '80 de los Chaebol o modelo empresarial de conglomerados, el país incrementó su PIB destinado a Ciencia a una increíble cifra de 4,6 %, la que se ha mantenido en la última década, siendo hoy los rubros tecnológico y automotriz, los que lideran los rankings de fiabilidad en el mundo.
Según la OCDE, Chile es el país que menor gasto del PIB tiene en el apartado de Innovación y Ciencia con 0,4 %, siendo el momento ideal para incrementar esta cifra y potenciar el desarrollo científico de la mano de instituciones académicas.
Esto debiera incrementar el interés en desarrollar Ciencia en Chile: un trabajo entre el Estado, la Universidad y el mundo privado.
"Según la OCDE, Chile es el país que menor gasto del PIB tiene en el apartado de Innovación y Ciencia".
Dr. Felipe Carevic,, Universidad Arturo Prat