ME-O admite "desprolijidad" en su rendición de gastos
El excandidato del PRO negó haber recibido aportes extranjeros para su campaña de 2013.
Mabel González - Medios Regionales
El excandidato presidencial y fundador del Partido Progresista (PRO), Marco Enríquez-Ominami, reconoció ayer que hubo "desprolijidad" en la rendición de gastos de su campaña de 2013 ante el Servicio Electoral (Servel). El político reaccionó así a los cuestionamientos que ha recibido por el uso de un jet privado durante su carrera a La Moneda.
"Se declaró por la vía publicitaria, lo corregiremos el 2017", dijo el ex diputado en radio Agricultura, al ser consultado por qué los costos del uso de este avión no fueron rendidos ante el Servel en la categoría de traslados.
"Esto fue aprobado por el Servel y objetada nuestra rendición por lo alto del monto", aseveró. "Corregiremos lo que evidentemente es una desprolijidad", agregó.
El dirigente del PRO remarcó que usar jets privados es una práctica extendida entre los postulantes a La Moneda. "Que levante la mano qué candidato presidencial no se ha subido a un jet", emplazó.
Sin embargo, el excandidato negó haber recibido aportes del extranjero, lo que está prohibido por ley.
"Ese avión, al igual que Michelle Bachelet, al igual que Salvador Allende, al igual que Ricardo Lagos, fue utilizado en el caso nuestro, no solo para recorrer Chile, sino que fue la pieza publicitaria principal de nuestra campaña", afirmó.
El político agregó que "en esa campaña franciscana que gastó diez veces menos que Michelle Bachelet o Evelyn Matthei, ese avión lo pagamos nosotros".
Enríquez-Ominami dijo desconocer a quién pertenece el jet, que según publicó La Tercera, es propiedad de la empresa brasileña TAP y en él ME-O viajó a Sao Paulo junto a ejecutivos de la firma OAS, que en Brasil está siendo indagada por corrupción.