Camila Infanta S.
Aún consternado por la masacre en una discoteque gay en Orlando, Florida, el Presidente de EE.UU., Barack Obama, aclaró ayer que no existe una clara evidencia hasta ahora de que Omar Mateen, el asesino de unas 49 personas, se inspirara en el Estado Islámico ni de que hubiera mano extranjera en el ataque. Se trata de otro ejemplo de "extremismo de origen interno".
El Mandatario aclaró que "el FBI está investigando esto como un acto de terror. Iremos a donde sea que los hechos nos lleven. Lo que sí está claro es que él (Mateen) era una persona llena de odio", sentenció.
Según expresó, el hombre manifestó su apoyo a diversas organizaciones islámicas con frecuencia enfrentadas entre sí.
Mientras ayer se lograban identificar a 48 de los 49 cadáveres (el número 50 es el propio atacante que fue abatido por la policía) y se improvisaban altares para las víctimas de la peor masacre tras el atentado del 11 de septiembre de 2001 a las Torres Gemelas, se informó que el hombre de 29 años entró al recinto armado con un fusil AR-15 y disparó sin descanso: 20 rondas, 40, 50 y luego más.
En un espacio tan reducido, las balas difícilmente erraban. Disparó a la policía. Tomó rehenes y falleció en un intercambio de disparos con miembros de los equipos especiales SWAT entre medio.
El director del FBI, James Comey, dijo que Mateen tenía "fuertes indicios de radicalización" y que probablemente estaba inspirado por organizaciones terroristas extranjeras.
Agregó que Mateen llamó al número de emergencias 911 más o menos al mismo tiempo que sucedió el ataque y no sólo expresó su lealtad al grupo extremista Estado Islámico, sino también su solidaridad con los hermanos Tsarnaev, autores de los atentados al Maratón de Boston.
Cierre de fronteras
Muy lejos de calmar las aguas, el eventual candidato republicano a la Casa Blanca, Donald Trump, aseguró ayer que si logra ser Presidente de EE.UU. vetará la entrada de musulmanes a su país e insinuó que el Presidente Barack Obama podría tener algún grado de complicidad con la matanza.
"Cuando sea elegido, suspenderé la inmigración de zonas del mundo con una historia demostrada de terrorismo contra Estados Unidos, Europa y nuestros aliados, hasta que entendamos cómo acabar con estas amenazas", dijo.