Bolivia: país de contactos
El Estado Plurinacional de Bolivia posee una ubicación estratégica en el Cono Central de Sudamérica, que la convierten en un una nación de contactos y no de antagonismo. A pesar de haber afrontado guerras con Chile, Brasil y Paraguay, donde perdió 120 mil km2 de territorio, desarrolló una política de integración que contribuyó a fortalecer los lazos de cooperación, amistad y a mantener la paz y democracia en Sudamérica.
Esta política , impulsada en 1940 desplegada por Alberto Ostria Gutiérrez, canciller del presidente Enrique Peñaranda, buscaba superar el enclaustramiento al que contribuyeron los conflictos limítrofes por interesar a los países vecinos del Atlántico en el establecimiento de vínculos basados en el aprovechamiento de su riqueza natural, en especial la que procedía del oriente boliviano.
Es un país clave en las alianzas de integración, la nación con más vecinos fronterizos en esta parte del mundo; limita con cinco países y es tránsito obligado para las personas y bienes de consumo que circulan entre el Pacífico y el Atlántico. Es el territorio geopolíticamente necesario en el continente. Se conecta el Atlántico, vía la -, ha consolidado una alianza a merced del Acuerdo de Complementación Económica 36 (ACE-36) que vincula a esa nación con el Mercado Común del Sur (Mercosur).
La influencia geopolítica de Bolivia llegó a la Comunidad Andina (CAN), el proyecto de integración más antiguo de Sudamérica. Los procesos de articulación política aún no prosperan allí por efecto de los tratados de libre comercio que negociaron Colombia, Perú y Ecuador con Estados Unidos y Europa.
Bolivia acordó el ACE-22 con Chile, con la perspectiva de colocar hasta 7.000 ítems en el mercado vecino, estratégico por su cercanía con el Pacífico.
Un clima de confrontación entre las cancillerías de Chile y Bolivia, no es la mejor manera bilateral de resolver diferendos. Una acción diplomática de confrontación verbal entre las cancillerías de ambos países hace más lejana la posibilidad de buscar una solución a la mediterraneidad de Bolivia.
Se debe gestionar el acercamiento y retomar los 13 puntos de la agenda bilateral y crear un clima político y diplomático.
"Un clima de confrontación entre las cancillerías de Chile y Bolivia, no es la mejor manera bilateral de resolver diferendos".
Carlos Graña Sarmiento,, periodista"