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Panaderos no creen que la marraqueta esté en riesgo de desaparecer

Los emprendedores no temen efectos negativos producto de la baja de sal al pan batido. Tampoco coinciden en que cambiará la composición y textura del alimento.
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En el 2009 las marraquetas tenían una cantidad de sal equivalente a 800 o 1.000 miligramos de sodio por 100 gramos de pan. Lo que motivó a partir de ese año al Ministerio de Salud, a raíz de indicaciones dadas por la OMS, de ir bajando gradualmente este elemento en los alimentos.

Por lo mismo en la ecuación dada, la cantidad de sodio no debería sobrepasar los 400 miligramos, los que actualmente tienen en jaque a la marraqueta o pan batido, que tiene niveles superiores a los nombrados. De todas formas, este descenso gradual del componente tiene sin cuidado a los panaderos locales.

Raúl Martínez, dueño de la panadería "Castillo" ubicada en el barrio El Morro cree que, a diferencia de los que se dice que al bajar la sal a la marraqueta se pondría en peligro la existencia de este tipo de pan, ésta no estaría en riesgo.

"Lo que puede cambiar un poco es el sabor. La gente está acostumbrada a la marraqueta tradicional, pero no va a cambiar en lo crujiente. Solamente el sabor se verá alterado, yo la he probado y mezclándola con otras cosas no se siente tanto la diferencia", dijo.

De todas formas cree necesaria la baja en el sodio del pan, ya que es algo que ayudaría a tener una vida más saludable, pero ve poco probable que la gente deje de consumir el alimento pese a la menor cantidad de sal. Acutalmente vende, solo en la mañana, 100 kilos de pan batido.

"sin fundamento"

Marta González, presidenta de la Asociación Gremial de Industriales Panificadores de Tarapacá (Asipat), que agrupa a más de 40 panaderías de Iquique y Alto Hospicio, especificó sobre los rumores de que el tradicional alimento podría desaparecer que "es absolutamente falso y sin fundamento".

"Estamos conscientes de la problemática del alto consumo de sodio que existe en el país, por lo que ya estamos trabajando en eso. Estamos alineados con el Ministerio de Salud y con Fechipan ( Federación Chilena de Panificadores), a la cual pertenecemos y nos respalda", destacó.

Asimismo, la presidenta contó que firmaron un convenio voluntario con Fechipan y el Ministerio de Salud, el que establece ir reduciendo la cantidad de sal paulatinamente en sus "amasijos", sin afectar la calidad del producto. "En Iquique ya hay panaderías adheridas a este convenio voluntario y que va en beneficio directo a la salud pública. Llamamos a la calma, ya que este producto nacional que nos caracteriza seguirá en nuestras mesas", señaló.

Por su parte el doctor especialista en cirugía bariátrica, Jorge Widerström, sostuvo que desde el punto de vista de la salud pública siempre es bueno controlar los niveles de exceso en los alimentos más consumidos por la población chilena, en este caso el pan.

"De todas formas tú puedes bajarle el sodio y si le agregamos otras sustancias que son nocivas como la grasa u otros componentes tampoco quedaría muy balanceado el alimento", consignó añadiendo que posiblemente el cliente si encuentra que el pan está "desabrido" por la falta de sal, va a compensar con un poroducto más salado.

400 miligramos rey godo de España, fue exhumado y trasladado en una caja de zinc