Pamela Vallejos Riquelme
Un procedimiento un poco más complicado a lo planificado, fue con el que se encontraron los detectives de la Brigada de Investigación Criminal (Bicrim) de la Policía de Investigaciones (PDI), luego que llegaran a un domicilio en la población Cerro Dragón en busca de un celular que había sido robado, encontrándose con droga y armamento en su interior.
Según antecedentes entregados por el subprefecto Mauricio Gutiérrez, jefe de la Bicrim Iquique, la diligencia se enmarcó en una investigación por la sustracción de un celular durante horas de la tarde, desde el interior de un vehículo que se encontraba estacionado en avenida Luis Emilio Recabarren.
Tras esto y con intención de recuperar su celular, la víctima realizó la denuncia respectiva en la PDI, iniciándose la investigación respectiva.
"Al recibir la denuncia inmediatamente comenzamos con las diligencias por el hurto, por lo que se utilizó sistema tecnológico para dar con el paradero del teléfono. Es así que se logró activar el GPS de éste, el cual nos llevó a un domicilio de la población Cerro Dragón", comentó el subprefecto Gutiérrez.
El jefe de la Bicrim agregó que con la orden respectiva llegaron al domicilio en cuestión, encontrándose no sólo con el celular hurtado, sino también con droga y armamento de distinto calibre.
Incautación
Según detalló en una de las habitaciones se encontraban dos jóvenes con la especie denunciada sobre la mesa, además de un papel blanco contenedor de cocaína base y diversos papeles cortados.
En total se encontraron 900 gramos de pasta base de cocaína, pistolas, estoques de fabricación artesanal y seis cartuchos de munición 9 mm y un cartucho calibre 20 mm, ambos sin percutar, además de dinero en efectivo en billetes de baja denominación, además de utensilios que se utilizan para dosificar la droga.
El subprefecto, Gutiérrez agregó que todo fue avaluado en $3 millones.
Finalmente el procedimiento culminó con la detención de cuatro personas. C.F.B., de 25 años; C.V.M., de 53 años; S.M.S., de 26 años; y; S.G.A., de 17 años.
Control
Tras el control de detención, los dos primeros imputados quedaron con arresto domiciliario nocturno, siendo formalizados por microtráfico.
En tanto, S.G.A. fue formalizada por receptación, quedando con firma mensual y arraigo nacional, mientras que S.M.S. no fue posible imputarle un delito ya que no habían antecedentes suficientes para hacerlo.