Valeria Barahona
Tomó un tiempo en llegar a nuestro país una discusión que, para muchos, partió en Suecia, donde en 2014 un grupo de apoderados propuso al gobierno de la ciudad de Hallstahammar reducir la cantidad de tareas que llevaban los niños a casa, "al alegar que deben aprender todo lo que necesitan durante el horario escolar", según informó la cadena británica BBC. Como sea, el tema ya se instaló en Chile.
El debate sobre cuánto es el tiempo preciso que deben dedicar los niños a su formación, sumado a si deben llevar trabajo escolar adicional para realizar en sus hogares, las famosas tareas, ha sido fuertemente promovido, entre otros, por el movimiento "La tarea es sin tareas", que en Facebook ya cuenta más de 90 mil seguidores.
Proyecto de ley
En junio la ministra de Educación, Adriana Delpiano, presentó ante el Senado un proyecto de ley que busca evitar el exceso de tareas escolares que se envían al hogar, actualmente en discusión.
"Padres e hijos, cansados ya de una larga jornada en el trabajo (y la Jornada Escolar Completa, JEC), comienzan con una 'batalla' agotadora por terminar con las tareas, preparar trabajos, estudiar para las pruebas, etc., lo que suele darse en un contexto relacional de molestia recíproca y sobrecarga de exigencias", se plantea en el proyecto enviado por el gobierno.
De esta forma, "se descuidan otras áreas de la vida necesarias para un desarrollo infanto-juvenil saludable, tales como elcultivo de los vínculos con la familia y amigos, el sueño, los intereses personales, conocerse, descubrirse y entenderse", agrega el texto.
la iniciativa, en suma, cuestiona la Jornada Escolar Completa que se instauró en los 90 con miras a la "formación integral" de los estudiantes. Los que la apoyan destacan que, en la práctica, los colegios la utilizan para preparar mediciones cuyo resultado incide en el aporte monetario estatal, como el Simce.
Encuesta de la uai
La Escuela de Psicología de la Universidad Adolfo Ibáñez encuestó a 1.864 apoderados en todo el país, de los que el 73,4% opinó que sus hijos se encuentran "estresados por el exceso de tareas escolares", según publicó esta semana la casa de estudios.
Asimismo, el 81,9% de los participantes señaló estar en desacuerdo con las tareas y el estudio escolar en el hogar, debido a que estiman que sus hijos destinan menos de diez horas semanales a actividades de esparcimiento. Junto a esto, el 91,1% de los padres señaló que desearía tener más tiempo libre con sus niños para realizar actividades no académicas.
Horas de juego
Los investigadores Eva Dauelsberg, Jaime Hernández y Paula Cornejo dice que "con la instauración de la JEC, las horas de entretenimiento de los niños han disminuido en dos horas diarias". "Tomando en cuenta que, para un desarrollo sano, los niños deben jugar alrededor de 15 mil horas durante sus primeros siete años, la realidad nos muestra un déficit de alrededor de seis mil horas". En este escenario "resulta fundamental destacar la relevancia del ocio en la salud mental de las personas. Es, precisamente, a través de estos espacios donde se desarrolla la imaginación, la reflexión, la creatividad y el enriquecimiento en la relación entre padres e hijos", sostienen los psicólogos. Esto además conllevaría "una mejor regulación emocional" de los menores.