El fenómeno de la abstención
Hay quienes en política dicen que ya todo está visto, dicho y escrito, pero en los últimos años, tras la aparición del voto voluntario, la incertidumbre comenzó a ser parte de las incógnitas que traen las elecciones.
En época del voto obligatorio, era hasta incluso posible hacer un mapa, donde habían regiones completas que eran designadas como proclives a votar por una u otra coalición. Tanto era así que hasta los partidos eran capaces antes de llegar a las urnas, de determinar con bastante precisión hasta la cantidad de votos que debieran sacar sus candidatos cuando estos no tenían un contendor de su misma tienda política.
El voto voluntario vino a desordenar ese panorama, pero lamentablemente también de la mano llegó la abstención electoral, un tema que hasta hoy no tiene solución.
Llamados a votar, que parten desde la Presidenta de la República Michelle Bachelet, sus ministros y una bajada regional, fueron parte de la campaña desplegada para intentar que los chilenos y los tarapaqueños en nuestra región, puedan volver a las urnas.
Antecedentes para poder cuantificar previamente cual podría ser el número de personas que sufrague hoy no hay muchos.
En la pasada elección votaron en Tarapacá algo más de 61 mil personas, de un universo total de 143 mil habilitados. La cifra ya hace pensar en que la mitad de la región no llegó a sufragar.
Luego vinieron las presidenciales, donde las cifras fueron bastante similares con un poco más de 65 mil votos emitidos en la región en la segunda vuelta.
Pero a estos datos, en los últimos años se sumó el descontento popular dirigido hacia la clase política, algo que vino a aumentar la incertidumbre, con personas que han declarado en encuestas y redes sociales que no tienen intenciones de participar del proceso de hoy.
Ante este escenario, solo habrá que esperar a que transcurra la jornada, pues para muchos analistas lo más grave sería que la abstención siga creciendo, asegurando para los nuevos alcaldes electos un nuevo periodo donde gobernarán con una votación baja y que no representa al grueso de los habitantes de sus comunas.
"El voto voluntario vino a desordenar ese panorama, pero lamentablemente también de la mano llegó la abstención".