A propósito de la discusión en torno a la elección de Donald Trump, no hay que olvidar que la pregunta esencial de una democracia no es ¿Quién debe gobernar? sino ¿En qué forma los ciudadanos podemos organizar las instituciones políticas a fin de evitar que los gobernantes malos o incapaces, que llegan al poder, puedan ocasionarnos demasiado daño?
Lamentablemente, predomina la absurda idea de tener líderes infalibles en el poder a los cuales se les libera de todo control o contrapeso. Un engaño que siempre pone en riesgo la libertad de los ciudadanos comunes y corrientes, sin importar quién esté a la cabeza.
Jorge Gómez Arismendi,
director de Investigación FPP.
Centro: más orden y seguridad
Esperamos que la nueva administración municipal haga una mejor labor dentro de sus atribuciones para lograr un mayor orden y seguridad en el sector central. El nuevo concejo debe trabajar unido, sin divisiones odiosas, dentro de un saludable clima de concordia, consenso, desterrándose la soberbia y la prepotencia, volviendo al realismo y desechando las quimeras y los proyectos fantásticos o impracticables. ¿Estaré soñando?
Cuando hablo de orden me refiero al ordenamiento del tránsito, comercio callejero, limpiadores de automóviles, otorgamiento de patentes de alcoholes, considerándose la opinión de las juntas de vecinos.
Respecto al tema seguridad, que se trabaje conjuntamente con las policías, debe haber una reorganización total del servicio de seguridad comunal, que debe estar al mando de un oficial de policía retirado; que haya una cantidad adecuada para un servicio permanente y eficaz, cuya labor debe ser supervisada estrictamente; que se informe mensualmente los servicios prestados. En apoyo de esas camionetas debe contarse con una fuerza de motocicletas de seguridad de acción rápida.
Como complemento a la seguridad deben instalarse mucho más cámaras de seguridad en lugares estratégicos; una potente iluminación estableciéndose un buen servicio para la reposición de las luminarias apagadas. A lo cual se debe agregar repintar las líneas peatonales casi inexistentes en muchísimas esquinas del centro. No hay servicio periódico de mantención, unida, al parecer la deficiente calidad de la pintura o con mucho diluyente. Reposición de veredas también ayuda a evitar caídas de peatones. Eso también es seguridad.
En el tema de la congestión vehicular están involucrados el orden y la seguridad. La Seremi y la Dirección Municipal tienen que trabajar con los actores del transporte de pasajeros urbanos. Me parece que hay tomar medidas draconianas para aliviar la congestión. Es apremiante un nuevo terminal rodoviario fuera del centro.
El centro merece mostrar un mejor ambiente con más orden y seguridad.
Mario Zolezzi Velásquez