Apatía, indiferencia, desinformación han demostrado las autoridades locales por una fecha de tanta importancia para Iquique: el 23 de noviembre de 1879, cuando una fuerza naval ocupó pacíficamente el puerto, haciendo flamear orgulloso el pabellón tricolor con la estrella solitaria. Ese acontecimiento marca el término de un período y da inicio a otro de nuestra historia citadina. Nunca he observado algún acto oficial conmemorativo.
Desde hace años he escrito en la prensa local sobre este tema. No hay ninguna calle que se denomine "23 de Noviembre", tampoco otra que honre la memoria de Miguel Gaona, oficial que fue provisoriamente la primera autoridad militar chilena de Iquique.
El 23 de noviembre de 1979 se cumplió el centenario de esa gran fecha histórica. Nada se hizo, a pesar que regía la dictadura militar. Un diario capitalino publicó una nota mía sobre ese olvidado acontecimiento. Años después, restaurado el régimen democrático, envié un oficio con un antecedente histórico al respecto, destinado a un gobernador provincial . No contestó. En una oportunidad consulté telefónicamente a la Armada en Iquique sobre el por qué en Iquique no se celebraba esa fecha histórica. El funcionario respondió que para ellos era "un acto administrativo". ¡Increíble!
La Municipalidad de Iquique se centra en la celebración de la formación de la Junta Municipal, 25 de noviembre de 1879, que se le da una trascendencia exagerada, desproporcionada. Esa Junta es un organismo municipal provisorio bajo el régimen de ocupación militar. Después será reemplazado por la Municipalidad de Iquique, instalada en mayo de 1885 bajo las leyes chilenas, una vez que Tarapacá pasó a ser definitivamente parte de Chile, gracias a la ratificación del Tratado de Ancón.
¿Las autoridades civiles y militares algún día cambiarán de actitud en relación al "23 de Noviembre"? Francamente no creo, salvo un milagro bíblico.
Calle Bulnes
Excelente la idea de ensanchar algunas arterias de la ciudad, sin embargo, con profundo pesar debo comunicar que perdimos calle Bulnes, desde Barros Arana al oriente hay vehículos estacionados en ambos lados, dejando solo espacio para pasar de a un vehículo.
Incluso hay un sector donde instalaron en la calle un toldo para darle "sombrita" para la joya de la casa que hay. ¡Así nadie puede!
Mariela Maureira, secretaria.
Mario Zolezzi Velásquez.