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Loreto, un pequeño e histórico pasaje que se negó a cambiar de nombre

Esa arteria de La Puntilla mantuvo su denominación tras la chilenización.
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Rodolfo Capino Valencia

"No somos vecinos, somos familia". De esta forma Manuel Prieto, vecino del pasaje Loreto de La Puntilla, resume qué significa vivir en este histórico sector de Iquique que sobrevive al pasado peruano que tuvo la ciudad. Ese sentimiento es compartido por otra vecina de esta arteria, Leila Vásquez, quien agrega: "Los que somos del barrio somos como familia, porque todos somos nacidos aquí, por eso me siento orgullosa".

La historia del pasaje Loreto se remonta a los antiguos bodegones y casas antiquísimas, cuyo nombre permaneció luego la chilenización conseguida por la Guerra del Pacífico.

Según explica Patricio Rivera, académico e Investigador de la Facultad de Ciencias Humanas de la Universidad Arturo Prat, hacia 1883 los registros identifican al pasaje Loreto entre calles que todavía tienen nombre peruano, pero el proceso de chilenización que parte desde 1908 hasta 1930, extirpa las calles peruanas cambiando el nombre, pero el pasaje Loreto sobrevive.

"Eso sucedió tal vez porque el sector no era transitado y estaba escondido entre los bodegones salitreros, no era transitado. Cabe consignar que el sector era peligroso por la presencia de muchos contrabandistas y choros y eso hacía que la policía municipal y luego de Carabineros no transitara con sus patrullas de a caballo por ahí. Hacia la década del 1920 hay muchas denuncias de ataques a policías y hasta robo de sus caballos en Iquique", cuenta el también doctor en Didáctica de las Ciencias Sociales.

Referente de iquique

Loreto es un corto pasaje, entre Patricio Lynch y Obispo Labbé, que albergó antiguos bodegones y en uno de sus costados se ubicó la primera Zona Franca de Iquique.

Patricio Rivera cuenta que el barrio de La Puntilla como tal surge con los chilenos, y ha ejercido un papel social de normas de comportamiento urbano, dentro de la estructura social iquiqueña que se ha mantenido históricamente en un espacio definido y ha reproducido continuamente sujetos sociales que han generado una singularidad en las relaciones de sociabilidad urbana, en torno a actividades ejes de extracción económica como la pesca artesanal, el contrabando, la estiba del puerto y oficios varios relacionados con la clásica productividad de la ciudad.

"En el siglo XIX, época del Perú, era zona de bodegas salitreras, debido a su cercanía al puerto. Sin embargo, existía un desembarcadero al costado sur de donde está la IV Zona Naval y entre al ex muelle El Galeón. En ese lugar se desembarcaba contrabando y se llegaba de noche o madrugada. Cabe recordar que hacia las primeras décadas del siglo XX no había alumbrado público y por ende La Puntilla surge entre bodegones salitreros, contrabando y pescadores", comenta el académico.

Por ello, su lugar social es netamente popular. No obstante, con la edificación de los departamentos durante la Unidad Popular que son entregados tras el golpe de estado a funcionarios de Carabineros y Fuerza Aérea hasta la actualidad, el barrio es mutilado y hoy sobreviven pasajes entre las calles habitadas aún por los antiguos vecinos.

A juicio de Rivera, el legado del pasaje Loreto es la sobrevivencia de un Iquique peruano, el referente del Iquique en su origen primario de la república y además simboliza el pasado salitrero por la presencia de las bodegas de salitre que aún se veían hasta fines de los setenta al atravesar el actual ex paseo Lynch. "Recorrer ese pasaje es como recorrer pasaje Santiago, Bellavista Estación o calle Ferrocarril y Blanco Encalada de El Colorado y las calles de El Morro. Es volver al antiguo Iquique, ese que se extraña", remata el académico.

"EL PUCHERO"

Durante la gran crisis de 1931, que es un efecto de la crisis mundial capitalista de 1929, el barrio La Puntilla fue centro de entrega de comida, llamada "el puchero" y preparada por los regimientos de la zona ante la hambruna existente, debido al cierre de muchas oficinas salitreras y los obreros pampinos cesantes bajaban al puerto de Iquique con sus familias.