Nicolás Labra G. - Deportes

Un total de 87 minutos le costó al Arsenal romper la literal muralla de jugadores que dispuso el West Bromwich Albion, en su área chica. Pero fue Olivier Giroud, con un certero cabezazo, tras centro de Mesut Özil, el que puso el 1-0 y desató los festejos en el Emirates Stadium.

Pese al gol del francés, fue Alexis Sánchez el que puso el mejor fútbol para tirar del carro de los Gunners. El chileno tuvo por lo menos tres chances claras para abrir la cuenta. La más cercana fue a los 49' cuando tras un córner cogió el rebote, dejó en el suelo a tres jugadores y al arquero, pero definió al palo izquierdo.

Antes, a los 32', el arquero Ben Foster, figura absoluta de la visita, había sacado de un manotazo un potente derechazo del seleccionado. Y cuando el Niño Maravilla comenzaba a impacientarse por la impericia de sus compañeros y la impenetrable defensa del equipo de Tony Pulis, apareció el ya mencionado tanto de Giroud.

Eso sí, muy en su estilo, Alexis felicitó a su compañero tras el único gol del partido, con una patada en los glúteos, hecho que fue viralizado rápidamente en las redes sociales.

"Fue un triunfo vital, estábamos bajo presión y éste era exactamente el tipo de partido que no puedes perder", comentó el DT Arsene Wenger, tras el partido. Con este resultado, el Arsenal se mantiene cuarto con 37 puntos y a nueve del líder, el Chelsea.

37 puntos sumó el Arsenal de Alexis. Ahora está ubicado en el cuarto lugar, a nueve puntos del líder, el Chelsea.