Pamela Serey A.
Con la llegada del verano se vuelve necesario usar ropa más corta, la que deja ver algunas imperfecciones del cuerpo, entre ellas, la odiada celulitis.
En general, las mujeres sabemos que su aparición se asocia a hábitos poco saludables, como una vida sedentaria, mala alimentación, estrés, ropa muy ajustada y malas posturas.
Pero también influyen la genética y los problemas hormonales. En síntesis, se trata de un tema que afecta a la mayoría, independiente de su talla.
"Ya no sólo importa estar delgada, sino que también hay que verse y sentirse bien. Esto es fundamental para la autoestima de muchas mujeres. Los tratamientos que son altamente efectivos para combatir la flacidez y celulitis, son la radiofrecuencia y la carboxiterapia", asegura Catalina Manzor, kineosióloga y directora de salud de clínica de cuidados Integrales para la mujer Be Mom.
Según explica, una solución duradera y visible, es el tratamiento de carboxiterapia, que mejora la oxigenación de los tejidos y que consiste en el uso terapéutico del anhídrido carbónico (CO2), en forma de gas. La administración es por vía subcutánea: "Se trata de un método eficaz, realizado por profesionales médicos, seguro y sin efectos secundarios".
Eso sí, para cualquiera de estos tratamientos, se recomiendan mínimo ocho sesiones y sus resultados se podrán ver tras la quinta sesión. Lo ideal es realizarlos dos veces por semana.
Pero las usuarias deben tener en cuenta que los tratamientos no son mágicos. Durante el proceso, y después, hay que mantener un programa de ejercicios y una dieta sana, pues, si por el contrario, la alimentación no es buena y se lleva un estilo de vida sedentario, el problema volvería en poco tiempo.
También existen otros tratamientos más modernos, como el lipobarrido de contacto, que es lo último en avance tecnológico.
Lo que hace es modelar el cuerpo mediante la eliminación de grasas, a través del barrido celular intradérmico. Se realiza en sesiones de 45 minutos y permite esculpir la silueta, reducir la celulitis, mejorar la musculatura y atenuar la flacidez.
Además, no es invasivo, ya que no es una técnica quirúrgica.
María José Gálvez, kinesióloga clínica y especialista en estética y dermatofuncional de este clínica, señala que el lipobarrido "emite una energía que va directo a la célula grasa, eliminando el contenido de ésta para luego poder arrastrarla por el sistema linfático y eliminarlo principalmente por la orina".
"Ya no sólo importa estar delgada, sino que también hay que verse y sentirse bien".
Catalina Manzor,, kineosióloga."