El paleoescultor iquiqueño que se preocupa de la fauna extinguida
Es autodidacta y tiene un objetivo claro con su arte: valorar el patrimonio olvidado en Tarapacá.
E n la década de los ochenta, el niño iquiqueño Juan Pérez Reyes soñaba con visitar museos de dinosaurios. Pero en su ciudad no existían exposiciones paleontológicas y, cada vez que encendía la televisión, consideraba injusto que Santiago de Chile tuviera tantas opciones culturales didácticas, mientras que en su terruño la única diversión estuviera dada por las bondades de la naturaleza.
El niño se transformó en adulto y no se ha olvidado de esa sensación de infancia: hoy en día con 40 años es un escultor y paleoartista local. Uno de sus objetivos principales es poder darle a la región de Tarapacá obras que eduquen sobre la fauna que habitó nuestra tierra hace miles de años.
Por eso, en 2015 presentó la exposición "Megafauna: esculturas reviviendo el pasado de Tarapacá", que estuvo conformada por tres esculturas de animales del pleistoceno -"la época de la película Era del Hielo", recordó Juan- y que hasta el día de hoy se encuentra en el Museo Regional de Iquique.
Asimismo, en julio del año pasado entregó a Pozo Almonte -por encargo de la Municipalidad de la localidad- una estatua del Tropidurus Tarapacensis o "Lagartija del Desierto", que tiene 9.20 metros de largo.
"Viajando a Bolivia y a Perú veía que había mucho interés en este tipo de arte de paleontología. Acá, en cambio, en los museos se expone sólo el patrimonio arqueológico de las culturas precolombinas, pero nada más, siendo que en la Pampa del Tamarugal se encontró un fósil de un Megatherium y también unos cocodrilos gigantes", dice Juan, que gracias a este conocimiento se sintió motivado por hacer saber a la comunidad regional que en Tarapacá también tenemos historia y "que no sea necesario tener que ir al sur del país para conocer estas cosas", precisa.
Las esculturas están hechas de poliestireno, fueron recubiertas de fibra de vidrio y resina, con un acabo de masa epóxica. En total, tardó un año y medio en realizar las tres figuras, llegando a pesar la más grande 400 kilos.
Autodidacta
Juan fue a la Escuela Artística Violeta Parra, donde aprendió nociones de pintura y dibujo en la enseñanza media. Si bien posteriormente siguió haciendo arte, "fue solo como hobbie", dijo.
Se dedicó a estudiar diseño gráfico con mención en publicidad en una escuela nocturna y le fue bien. Sin embargo, el arte era lo que más le llamaba la atención: "Hice mi agencia de publicidad, pero siempre estuve ligado al arte.
Siempre estuve ligado a la pintura, a la escultura y comencé a aprender por mí mismo", recuerda. Así fue como Juan fue buscando información en diversos lugares y empezó a trabajar con porcelana en frío.
Gracias a su destreza y talento, sus trabajos se fueron haciendo conocidos a nivel local. Hoy en día, una de sus entradas más estables son las que deja la confección de máscaras personalizadas para personas que participan en bailes típicos de la zona. Según cuenta, se ha hecho una cartera de clientes y puede vivir del arte, "pero no como artistas que de verdad son valorados", asegura.
Poco apoyo al arte
Si bien la exposición "Megafauna" fue un éxito en cuanto a asistencia y repercusión, el artista reveló que no fue aceptado el proyecto de continuación de la obra que había solicitado. "De todos los proyectos que se presentaron, el mío tuvo un ciento por ciento de aprobación, por lo tanto no entiendo por qué al final no me dieron el financiamiento", dice.
De acuerdo a lo que él cree, las municipalidades de la región están más interesadas en la entretención. "Gastan, no sé, $200 millones en traer a una persona y uno como artista pide dos o cuatro millones, pero te lo niegan", cuenta.
Es más, el Pérez contó que el sueldo que recibió por mes mientras trabajaba haciendo "Megafauna" fue sólo de cien mil pesos. "Me dijeron 'tómalo o déjalo' y obviamente lo tomé", cuenta.
Sin embargo, es entusiasta y quiere seguir postulando a trabajos relacionados con la paleontología.
De acuerdo a lo que dijo, ahora está interesado en realizar un proyecto nuevo sobre el "Chilesaurio", animal que corresponde al sur del país: "Hay personas que no van a tener la posibilidad de ir al otro lado de Chile para ver alguna muestra o algún fósil. Por eso yo quiero realizar una muestra que sea libre acá en Iquique para que todos tengan acceso al conocimiento de lo que es nuestro", consignó.
Paleontología
No cualquiera puede hacer arte paleontológico: "No es algo simple. Como yo hago arte realista, debo investigar lo que estoy haciendo porque sino en cualquier momento puede llegar alguien que sepa más y decir que mi escultura es incorrecta", plantea Juan.
Y la forma que él tiene de no equivocarse en lo que hace queda en familia: "Mi hermano es arqueólogo, así que con él trabajamos en conjunto", cuenta el paleoescultor. De esta manera, su trabajo es altamente profesional y cumple con el objetivo educacional que Reyes quiere imprimir en lo que hace: "Me interesa que la gente aprenda y pueda ver cómo eran los animales que hoy en día ya no están", dice.
"La idea es que no sea necesario tener que ir al sur para conocer estas cosas"
Juan Pérez Reyes,, artista plástico iquiqueño."
"Quiero realizar muestras que sean abiertas para todos los iquiqueños"
Juan Pérez Reyes,, escultor y pintor iquiqueño."