Tarapacá registró un aumento de un 73,2% en la cantidad de drogas incautadas durante el año 2016 en relación al 2015, lo que se tradujo en algo más de 8 toneladas de sustancias ilícitas que no pudieron superar los esfuerzos de las policías y Aduanas, saliendo así de las calles.
Que haya un alza tan significativa en la cantidad de estas sustancias que son interceptadas mientras eran transportadas a su punto de destino habla bien del trabajo de todos quienes participan en la cadena que implica un decomiso. Pero también pone en evidencia que la lucha contra el narcotráfico está más vigente que nunca.
Durante el 2016 sorprendieron los distintos métodos utilizados por los traficantes para intentar sortear los diversos controles, pasando de los ya tristemente tradicionales ovoides, a ser escondidos dentro de partes de vehículos, en alimentos sellados o cambiando de forma, dándole a estas sustancias una textura cremosa que asemeje, por ejemplo, shampoo.
Por ello, esta batalla contra la droga requiere de mejorar la tecnología, pues así como los narcotraficantes van avanzando en los métodos utilizados para el ocultamiento de las sustancias, las policías deben también estar cada vez más atentas para poder frustrar sus planes de la mano de visión nocturna o maquinaria capaz de detectar diferencias en las densidades de metales y otras tantas cosas que hoy son necesarias.
No hay que dejar de tener en cuenta que las drogas a medida que van superando los distintos controles van ganando mayor valor comercial y con ello también son muchas las personas dispuestas a arriesgarse para llevarlas a las calles.
Pero en esto no solo trabajan las policías, pues si baja la demanda, el negocio deja de ser tan atractivo y por ello es tan importante la labor que se realiza en materia de educación. Para ello se dedican organismos públicos como Senda, pero también es muy importante el apoyo de las personas en el día a día. Una familia que es capaz de dialogar de estos temas, será un pilar fundamental en este lucha que año a año dan tantos funcionarios de Carabineros, PDI, Aduanas y la Fiscalía entre otros.
"Durante el 2016 sorprendieron los distintos métodos utilizados por los traficantes para intentar sortear los distintos controles".