Mauricio Torres Paredes
Un total de 120 trabajadores fueron desvinculados por la compañía canadiense Teck, a cargo del proyecto minero Quebrada Blanca en Tarapacá.
La información fue confirmada por la propia empresa, firma que a través de un comunicado puntualizó que "las reservas minerales económicas de Quebrada Blanca estarán agotadas hacia fines del 2017" y si bien "la compañía está explorando procesos adicionales para extender la vida de la mina de la operación actual" el eventual cambio "implicará una reducción de 120 puestos de trabajo de tiempo completo en la fuerza laboral actual de 550 en Quebrada Blanca".
"El día de hoy (ayer) se notificó a los empleados afectados. Sabemos que esto crea un periodo de incertidumbre y desafío para nuestros empleados y, como tal, tenemos una variedad de planes en marcha para asegurar que estén bien apoyados durante la transición", informó la compañía. Además, se informó que "el número de contratistas también se verá reducido como resultado de este cambio".
Teck comunicó que mantiene el compromiso de proyectar la fase 2 de Quebrada Blanca, la que, de ser aprobada y autorizada, aumentará sustancialmente la producción de cobre, extendiendo la producción de la mina por más de 25 años.
Trabajo
El director regional del Trabajo, Víctor Inostroza, reconoció que los antecedentes eran manejados a nivel gubernamental desde hace al menos una semana, y que solo ayer se hicieron efectivos.
"La empresa nos comunicó la semana pasada a nosotros y también a los trabajadores. La compañía llegó a acuerdo con dos de los tres sindicatos, los que estarían representando a casi el 70% de los desvinculados. Hay uno que obviamente no llegó a acuerdo y va a esperar que se notifique a todos los trabajadores para ver los pasos a seguir: un reclamo administrativo en la Inspección del Trabajo o una demanda al tribunal laboral. La mediación no se descarta, pero va a depender de la posición que tomen los trabajadores", dijo.
Inostroza aseguró que como los trabajadores estaban conscientes de la inminente desvinculación, determinaron negociar las condiciones de salida, adelantando además la negociación colectiva de noviembre a abril.
Para la salida se sostuvo el pago total de la indemnización con un incremento del 20%, dos años por uno, la extensión de los seguros complementarios y la cesantía.
Dirigente sindical
Jorge Flores, presidente del sindicato que no llegó a acuerdo con la empresa y que decidió negociar en noviembre, aseguró que "esto obedece a malas prácticas por parte de Teck en términos de eludir y evadir los efectos de la Reforma Laboral. Los otros dos sindicatos aceptaron negociar ahora, pero todos en rigor lo hacemos en noviembre cuando termine la negociación de 2015. Enfocados en el bienestar de los trabajadores, rechazamos negociar y nos vamos a noviembre, cuando corresponde. Negociando después del 1 de abril todos los beneficios van a quedar como piso para futuras negociaciones". El dirigente agregó que iniciarán las "acciones que correspondan", aseverando que los despidos son "injustificados".