Sabemos que la tradición de realizar rituales para marcar un cambio de rol social, debe ser tan antigua como nuestra civilización, pero en la medida que evolucionamos debemos ir abandonando prácticas y costumbres que ya sabemos que solo aportan sensaciones desagradables.
Fueron los primeros y primitivos guerreros de los que heredamos la tradición de un ritual que pone a prueba la resistencia y fortaleza del combatiente, la cual traspasó siglos y algunas pocas sobreviven incluso hasta nuestra historia moderna. Los antiguos guerreros debían soportar duras y exigentes pruebas físicas para demostrar que eran merecedores de pertenecer a un selecto grupo y conformar la élite. Los rituales iniciáticos del tipo mencionado aún se mantienen en algunas instituciones sociales, deportivas, sectas e incluso en las universidades.
Existen registros que al crearse en Europa los primeros Centros Universitarios modernos, a principios del segundo milenio, se adoptan ritos iniciáticos que ya fueron rechazados en los centros de educación superior. Así por ejemplo, en el año 1495, en la Universidad de Leiptzig en Alemania, se condena formalmente el "ontgroening" (mechoneo), definido como el acto de ofender con insultos, atormentar, mojar con agua u orina y cubrir con tierra a los nuevos estudiantes. En el año 1684 en la Universidad de Cambrigde en Inglaterra, varios alumnos fueron expulsados por liderar el "hazing" (mechoneo). En Australia, el conocido mechoneo universitario recibe el nombre de "bastardisation", lo cual ni siquiera requiere traducción.
Podríamos llenar muchas páginas con las desagradables anécdotas de una tradición que se extendió por todo el mundo y se mantuvo por todo el segundo milenio. Sin embargo, desde hace ya varios años se escuchan cada vez más y más voces en contra de la desagradable iniciación a la vida universitaria, cada vez mas anacrónica. ¿Es que no estamos en condiciones ya de inventar otros rituales más acordes a nuestra evolución? Si nuestros jóvenes rechazan el abuso y la desigualdad, ¿por qué no se indignan con el deprimente mechoneo? Esta semana celebraremos la semana Tomasina con un "mechoneo solidario" y te invitamos a descubrirlo en medios y las redes sociales.
"¿Es que no estamos en condiciones ya de inventar otros rituales más acordes a nuestra evolución?"
Juan Carlos Carreño,, rector Universidad Santo Tomás."