"Las personas ven el tema del Sida pero piensan que no les va a tocar"
Alberto Mancilla, presidente de la casa de acogida para personas con VIH, analizó por qué los casos de confirmación del virus van en alza en Tarapacá. Además, expresó su preocupación sobre el cierre del hogar que lleva 22 años en Iquique.
En la calma del hogar "Nuestra Señora del Carmen" que dirige hace 12 años, Alberto Mancilla Varas habla sobre una realidad con la que a diario convive: el VIH/Sida.
El presidente de dicha fundación, que hace más de dos décadas acoge a personas infectadas con el virus, reconoce la gravedad en el incremento de casos confirmados en la región, no obstante tiene claro lo difícil que es luchar contra esto cuando el contagio se produce en una esfera tan íntima, en la cual ni autoridades ni especialistas pueden ingresar. Actualmente busca solución ante el próximo cierre de la casa de acogida.
- Un reciente informe del Instituto de Salud Pública reveló que en cinco años los casos confirmados de VIH incrementaron en 58% ¿cómo ve estos resultados?
- Es preocupante porque vemos que el problema va en aumento en la región, aunque eso es una realidad nacional. Estos resultados tienen que ver con que se está mejorando las pesquisas, es decir, todos aquellos casos que no habían sido diagnosticados es parte de ese aumento y también de los casos nuevos que deben estar llegando por lo mismo (…) Es medio difícil definir por qué, pero el hecho es que está aumentando y va a seguir aumentando.
- Las autoridades de salud indican que se están reforzando las acciones en educación preventiva, sin embargo Tarapacá sigue como la segunda región con la tasa más alta en VIH...
- Se está trabajando mucho en lo que es prevención, hay muchos organismos que están en la mesa del VIH, eso no se ha dejado de lado, en la práctica eso siempre se está haciendo. Lo que pasa es que al parecer no se están tomando las medidas de prevención en el momento que deben usarse, y eso es porque las personas no han tomado consciencia de lo que implica el VIH y por lo mismo tenemos un elevado número de sífilis, gonorrea, ¿y eso qué significa? que no se está usando el preservativo. Indistintamente del Sida, al aumentar la gonorrea es porque no se están tomando las medidas de prevención, y el uso del preservativo es lo único que lo va a proteger.
- Entonces ¿las estrategias de comunicación y prevención no están siendo efectivas?
- Las estrategias están bien definidas y también lo que hay que enseñar en los diferentes niveles de educación. Para mí el problema son las conductas sexuales que en la práctica son privadas (...) y ahí está el detalle porque uno no puede entrar en las conductas sexuales. Uno anuncia que no hay que tener múltiples parejas, que no hay que tener parejas que están en las drogas, pero a las conductas más íntimas no se puede llegar.
- ¿Será que las personas aún no asumen lo que conlleva tener VIH/Sida?
-Yo creo que las personas ven el tema del Sida pero no le dan importancia o piensan que no les va a tocar, pero el VIH ya ha tocado muchas puertas, sigue tocando y va a seguir aumentando por las conductas sexuales. El Sida no se va a terminar. Como problema de salud tiene otras implicancias, no es solo que uno se contagie con VIH ya que, por ejemplo, va acompañado con la tuberculosis.
- Desde su experiencia como director de la casa que acoge a este tipo de pacientes ¿qué tan complicando es sufrir de VIH?
- El VIH en la clase alta y media alta, en la práctica, tienen solucionado el problema porque tienen familia, tienen casa, tienen los recursos económicos; pero en la clase más baja el problema se complica, porque toda la parte social ayuda a esto, porque hay jóvenes que viven en la calle, que están en las drogas y todo esto ayuda a la transmisión del VIH. Estas personas son quienes llegan al hospital y luego acá (al hogar), ese problema no se va a terminar, la parte social donde está el VIH no se va a terminar y van a seguir llegando jóvenes al hospital y si la casa se cierra ¿dónde van a llegar esos jóvenes?.
- En torno al cierre del hogar, ¿ya tienen algún lugar para trasladarse?
- Estamos tratando de hacer algo para continuar con esto, hay ciertas conversaciones pero todavía no puedo afirmar que se van a llevar a efecto. Sí, están bien adelantadas pero nos faltan las reuniones principales con las autoridades que nosotros tenemos que relacionarlas para hacer andar esta segunda etapa porque nosotros, en la casa de acogida, ya terminamos una etapa y queremos tener otra.
- ¿Cuándo deben entregar el inmueble a la congregación Hermanas del Buen Pastor?
- Yo creo que junio.
- Y si hasta esa fecha no encuentran solución ¿qué pasaría con las personas que actualmente están en el hogar?
- Nosotros acá tenemos tres personas que están en situación de calle y por eso la idea es seguir trabajando y continuar con la casa en otro lugar y llevar a los jóvenes para allá, de lo contrario tendríamos que reubicarlos en un lugar donde puedan aceptarlos.
- ¿Y sería fácil que acepten a pacientes con VIH/Sida en otro lugar?
- En las condiciones que están los jóvenes es fácil conseguir porque en este minuto tienen una enfermedad crónica, se pueden movilizar, algunos con dificultad. El VIH hay que asumirlo, aceptarlo y convivir con las personas.
- Sin embargo, todavía existen estigmas contra estos pacientes...
- El estigma del VIH siempre quedó y cuesta sacarlo, cuesta que los demás asuman que son personas comunes y corrientes, que ellos tienen una enfermedad crónica, igual que un diabético, que un hipertenso.
- ¿Y eso dificulta conseguir voluntarias?
- El trabajo de las voluntarias es un trabajo de cuidados paliativos de las personas. La red de salud se encarga de la parte médica. Por ejemplo, cuando nosotros aquí hemos tenido personas con tuberculosis/Sida, vienen de los consultorios a darles el tratamiento para la tuberculosis, cualquier situación que tienen acuden al hospital donde tienen toda la atención; lo que sí, nosotros nos encargamos de controlarles la droga, asistirlos, alimentación, bañarlos, según las circunstancias en que se encuentren. Uno tiene que tomar las medidas de prevención en las enfermedades infectocontagiosas como cuando vienen con tuberculosis, pero con el VIH mayormente no tenemos problemas pero igual se toman las medidas de seguridad en la atención.
- ¿Seguirán trabajando las mismas personas cuando se trasladen a un nuevo lugar?
- Las voluntarias son las mismas y ya tienen bastante años y ya el cansancio les está tomando y nosotros vamos a empezar un periodo de captación de voluntarias para esta nueva etapa que queremos emprender. Con las voluntarias que lleguen hay que hacerles una inducción sobre el trato con las personas porque generalmente son todos jóvenes y usualmente los voluntariados trabajan con menores, adultos mayores, o con personas postradas; pero hacerlo con jóvenes, entre 20 y 40 años, cuesta un poco, hay que saberse manejar con ellos porque como son jóvenes quieren vivir.
Yo hago un llamado a que las personas que quieran cooperar como voluntarias, no es difícil pero hay que saber trabajar.
"Las personas no han tomado consciencia de lo que implica el VIH"