J. J. Brunner y la Nueva Mayoría: "Auguro un periodo muy turbulento"
El exministro de la Concertación dijo que al gobierno le faltó una "carta de navegación" en materia educacional.
Hasta la sede de la Universidad Santo Tomás de Iquique llegó el exministro de la Secretaría General de Gobierno del expresidente Eduardo Frei, José Joaquín Brunner, para participar en el inicio del año académico de la casa de estudios, y junto a ello exponer sobre la reforma educacional del actual gobierno de la Presidenta Michelle Bachelet.
"El gobierno imaginó una reforma de gran envergadura, pero quedó muy corto de ilusiones, del sueño que había tenido, simplemente por una muy mala planificación. Faltó un diseño coherente de hacia dónde se quería impulsar la educación chilena. No hubo una preocupación real por la calidad y la equidad, porque los dos van muy unidos. Me siento realmente muy frustrado por este intento mal concebido", expresó.
Para Brunner la reforma ni siquiera fue de mucha ambición, ya que estuvo mal pensada y diseñada, y sin prioridades claras, dijo el exsecretario de Estado en relación a la serie de proyectos presentados por el Ejecutivo al Congreso, desde la carrera docente, hasta las reformas a la educación escolar y universitaria, y la desmunicipalización.
"No hubo carta de navegación. En el mundo de la educación hay muchas ideas e intereses contrapuestos. En lugar de articularlos en una dirección determinada, el gobierno las dispersó. Nunca habíamos tenido una discusión tan enconada en el campo de la educación. El gobierno no supo dirigir la barca", agregó.
Brunner adelantó que el próximo gobierno deberá "restituir" un consenso a largo plazo con el apoyo de diversos sectores de la educación, "de lo contrario nos pasaremos discutiendo si hay que desmontar lo que el gobierno anterior hizo. Así ningún sistema puede avanzar. Hay que tener políticas con un horizonte de 15, 20 años".
Redefinir las bases
Respecto a la situación de distanciamiento que atraviesan los partidos de la centroizquierda de cara a las presidenciales, el exministro afirmó que "la Nueva Mayoría está pagando el precio de terminar un periodo muy frustrante para sus militantes".
"Hay que redefinir las bases de esta alianza, y no está claro que los partidos lo vayan a hacer. No hay debate que permita llegar a un diagnóstico común de los problemas. Auguro un periodo muy turbulento, de mucho protagonismo, caudillismo, poca preocupación por las ideas y más por la disputa de poder, lo que es normal en política, pero acompañada de un proyecto país en el que haya acuerdo. Si llega a ganar la derecha o centroderecha, sería un golpe bastante final para la Nueva Mayoría, coalición que se armó como pacto electoral. Si electoralmente fracasa, efectivamente se terminó", remató Brunner.