Mariela Cabello Venegas
Como un acto simbólico para conmemorar los 27 años en que la Organización Mundial de la Salud (OMS) dejó de considerar a la homosexualidad una enfermedad mental, el Instituto Nacional de la Juventud (Injuv) organizó la ceremonia de izamiento de la bandera de la diversidad y la no discriminación sexual.
La actividad que contó con la presencia de distintos representantes de la diversidad sexual, y autoridades regionales, encabezadas por la intendenta, Claudia Rojas, fue una instancia para reconocer los avances, pero también recibir las críticas.
Los avances
En este contexto, el director regional de Injuv, Carlos Barreto, valoró el trabajo del gobierno en torno a la concreción de leyes, que a su juicio, son un avance en términos de respecto y dignidad.
"En nuestro país está la ley 20.609 que establece medidas contra la discriminación, conocida como la Ley Zamudio o la ley de unión civil".
Las críticas
Por su parte, Felipe Pardo, del colectivo Arturo Trans Chacón manifestó que los avances en la práctica no son reales.
Pardo, precisó que las últimas cifras entregadas por el Movilh aseguran un aumento en los niveles de victimización, pese a las políticas públicas.
"Me cuestiono si realmente las políticas públicas están dando efecto o simplemente las generamos para hacerle creer a la sociedad y al mundo entero que Chile está avanzando en esta materia", dijo.
Otra de las demandas, fue en torno a mejorar la ley de identidad de género, según aseguró la representante de las transgénero, Karen Welsh.
"Nos gustaría que con las autoridades nos juntáramos a trabajar como corresponde a la región", inquirió.
Al respecto, la intendenta, recogió las palabras indicando que las políticas públicas allanan el camino para un trabajo en conjunto.