Tres estudiantes, entre 19 y 20 años, fueron reclutados por un traficante en Cochabamba. Los mismos jóvenes que fueron sorprendidos con 127 millones de pesos en cocaína cuando se movilizaban en un bus que se dirigía a Calama desde Iquique.

La fiscalización se realizó en la avanzada de Quillagua por funcionarios del Servicio de Aduanas, a quienes el nerviosismo de un joven les llamó la atención. Cuando los aduaneros lo revisaron, encontraron dos paquetes de droga adosados en su abdomen y zona lumbar. También sorprendieron a otros dos con la misma sustancia apoyada en sus cuerpos.

Los tres estaban transportando seis kilos y 380 gramos de esta droga, que en el comercio ilícito supera los 127 millones de pesos. Por la gravedad del delito quedaron en prisión preventiva.

Aduanas informó, además, que los detenidos recibieron los paquetes en un paso no habilitado cerca de Colchane, y luego se dirigieron a Iquique.

Dos hombres y una mujer de nacionalidad boliviana, cuando llegaron en un bus al control aduanero El Loa, fueron revisados por fiscalizadores de Aduanas de Iquique y al momento de ser consultados por el transporte de drogas, confesaron haberse introducido una cantidad importante de ovoides de cocaína. En total se metieron más de tres kilos.

"Fiscalizaron un bus proveniente de Iquique que se dirigía a Santiago. En la revisión seleccionaron con base en perfiles de riesgo a los tres imputados", dijo el fiscal Juan Zepeda.

Los tres sospechosos evacuaron en la instalación de Aduanas una parte de la cantidad que habían consumido antes de subirse al bus; el resto fue expulsado en el Hospital Regional.

Zepeda informó que Flores consumió un total de 90 ovoides (964 gramos), Ticona 101 (972 gramos) y Hurtado 115, equivalente a un kilo y 100 gramos. La Brigada Antinarcóticos de la PDI realizó el análisis de lo expulsado.

Por la gravedad del hecho, los tres bolivianos fueron formalizados por el delito de tráfico de drogas y arriesgan una pena de cárcel de cinco años.

Por los 120 días que durará la investigación, el juez de garantía, Ricardo Leyton, determinó que quedarán en prisión preventiva, medida cautelar solicitada por el Ministerio Público. La defensa pidió, en cambio, el arraigo nacional, pero esto fue denegado.

Carlos Luz Aguilera

Ala máxima pena que podía recibir siendo menor de 15 años, esto es 5 años de internación en régimen cerrado, fue condenada una adolescente que en septiembre del año pasado asaltó a un taxista en el sector sur de Iquique, apuñalándolo en el cuello.

Con base en lo que se dio por acreditado en el juicio oral, los hechos ocurrieron alrededor de las 15:20 horas del viernes 23 de septiembre del año pasado, mientras la víctima circulaba en su taxi colectivo por la avenida Francisco Bilbao, en dirección al norte, llevando como pasajera en el asiento del copiloto a la imputada.

Esta, con un cuchillo que portaba, lo agredió en el cuello y sustrajo parte del dinero que había recaudado el afectado producto de su trabajo. Luego huyó del lugar, siendo detenida por transeúntes y entregada a carabineros.

A consecuencia de lo anterior, el taxista resultó con una herida penetrante en el cuello, de carácter grave, lesión que podría haber sido mortal de no haber recibido una atención médica oportuna. Sin embargo, le provocó una disminución de su capacidad auditiva y visual, además de la alteración motora en un hombro.

En el juicio oral, el fiscal de Iquique, Eduardo Ríos, presentó los testimonios de la víctima, quien visiblemente afectado y haciendo frente a las incapacidades que le ocasionaron las lesiones, contó al tribunal cómo ocurrió el asalto; además de numerosos testigos que se encontraban en el lugar, quienes auxiliaron al taxista cuando este paró su vehículo y salió ensangrentado tratando de atrapar a la imputada, así como de quienes lograron detener a la menor.

También declararon los funcionarios de Carabineros que realizaron las diligencias de investigación y peritajes que permitieron aclarar los hechos, y el médico legista que confirmó la gravedad de la lesión sufrida por la víctima.

Terminado el juicio, el Tribunal Oral en lo Penal de Iquique resolvió acoger la solicitud de la fiscalía y condenó a la adolescente como autora del delito de robo con violencia calificado, lo que se traduce en una pena de 5 años de internación en régimen cerrado con programa de reinserción social.