En el diccionario no se encuentra la palabra autofagia, pero atendiendo a sus componentes léxicos se entiende por comerse a si mismo. Es una enfermedad mental, y también la sufren las sociedades que instigadas por malos políticos y gobernantes las convencen que todo puede ser gratuito. Muchos de los socios no quieren entender que nada es gratuito en la vida, como lo establece la naturaleza sustentada en la energía: "Para vivir es necesario intercambiar energía".

La única manera de pagar esa gratuidad y cumplir con la naturaleza es a través de impuestos, con la consiguiente carestía y alza del costo de la vida en las necesidades del diario vivir o a través de comerse el erario nacional y empobrecer. Se ofrece la gratuidad, como una vuelta al paraíso, dónde todo estaba al alcance de la mano, olvidando que fuimos lanzados y debemos ganar el sustento con el sudor de la frente. Los malos políticos hacen creer que el estado es un pozo de oro sin fondo y ocultan la autofagia en su beneficio.

Marcos Concha Valencia

He tomado esta iniciativa para hablar del mal cuidado que se le ha dado a la nueva cancha municipal construida en Playa Brava para el Mundial de Hockey realizado el año pasado.

He de decir que su cuidado no se ha mantenido después de terminado dicho evento y debido a su uso abierto a cualquier persona, es usada para otros deportes que producen daño en la pista, además de que los desperdicios son arrojados dentro de ella.

Escribo para hacer conciencia del mal uso que se le da y que la municipalidad pueda mantener su limpieza como se le tenía antes de realizar el mundial en nuestra cuidad.

Camila Quiñones