Inauguran planta de tratamiento de agua que rebaja nivel de arsénico
La infraestructura sanitaria permite cumplir con límite máximo del mineral fijado en 0,01 miligramos por litro.
Ayer Aguas del Altiplano inauguró la planta de tratamiento de agua potable El Carmelo en las cercanías de Pozo Almonte, que da cumplimiento al nuevo límite máximo permitido de arsénico, de 0,01 miligramos por litro, que comenzó a regir en enero de 2017.
Con la presencia del gerente general de la compañía, Salvador Villarino, quien indicó que ahora "Tarapacá cuenta con la mejor agua de su historia, cumple con la norma de la Organización Mundial de la Salud", se dio el vamos a esta nueva infraestructura sanitaria que se puso en marcha la misma fecha en que comenzó a operar la norma de la Superintendencia de Servicios Sanitarios, siendo la más grande en Chile y Sudamérica, en cuanto a su capacidad de abatimiento del arsénico y segunda a nivel mundial.
Tecnología
Con respecto a cómo opera la nueva infraestructura, el gerente general de la sanitaria, Sergio Fuentes, explicó que el agua se extrae de pozos en La Pampa del Tamarugal a 200 metros de profundidad que primero pasan por una planta elevadora que permite que el arsénico se remueva a través de unos filtros, que retienen el mineral. Después se hace un lavado de los filtros del lodo que se va a un vertedero y el agua filtrada cubre un extenso tramo de 70 kilómetros hasta llegar a los hogares de Alto Hospicio e Iquique.
"Como todos sabemos, en estado natural, el agua de nuestra zona contiene un alto nivel de minerales que pueden ser nocivos para la salud de las personas. Por eso, desde que atendemos a la comunidad, hace ya doce años, venimos realizando las inversiones necesarias para incorporar tecnología de punta en nuestras plantas de tratamiento y así garantizar la calidad del suministro", agregó el gerente regional de Aguas del Altiplano, Sergio Fuentes.
Inversión
El mejoramiento de la infraestructura de la planta de tratamiento de El Carmelo alcanzó una inversión de US$8,7 millones. Los trabajos incluyeron la incorporación de un moderno sistema de coagulación y filtración que procesa un caudal de 750 litros por segundo.
A la cita concurrió el superintendente de Servicios Sanitarios, Ronaldo Bruna, quien comentó que esta planta "cumple con todas las características para que el agua que le llegue a los vecinos sea de la mejor calidad a nivel mundial".
Por lo cual hizo un llamado a que la población tome agua de la llave: "Ya pueden ir sustituyendo esta agua por la que compran en los supermercados".
Por su parte, la intendenta Claudia Rojas precisó que "si hablamos de calidad de vida, lo primero que se nos viene a la cabeza es que las personas cuenten con las condiciones sanitarias mínimas para vivir, entre ellas, tener el consumo de agua asegurado no solo en su cantidad sino también en su calidad".
Por último, la sanitaria informó que esta planta es parte de un plan de inversiones por US$50 millones que consideró, entre otros, contar con agua que tiene los más exigentes estándares de calidad.
"El agua de nuestra zona contiene un alto nivel de minerales
Sergio Fuentes"
236 mil personas se abastecen de agua potable que produce esta planta.
70 kilómetros debe atravesar el agua hasta llegar a los hogares en Iquique y Alto Hospicio.