La semana anterior, hubo una publicación en El Mercurio de Santiago respecto al proyecto de dos espigones para contención del oleaje en Playa Brava, generando un sector apto para el baño.
Este proyecto se presenta como alternativa al ya desahuciado Rompeolas que se planificó para la misma playa, y que cuadriplicó su costo inicial, llegando a sobrepasar los $50.000 millones, mientras que los espigones bordean los $10.000 millones y si se presentan como alternativa porque se reconoce la necesidad de descongestionar Playa Cavancha saturada en temporada alta.
La ciudad requiere seguir creciendo turísticamente, y una playa colapsada no es solución, por ello el proyecto de los espigones y dar una nueva alternativa es beneficioso para la ciudad. Y esperamos que no siga el mismo recorrido que el Rompeolas, en que los aumentos del valor del proyecto terminaron por hundirlo.
En ese sentido, las costas del Pacífico en Chile están dentro de los mares que con más fuerza azotan en el mundo, y por la envergadura de este proyecto el estudio debiera considerar especialmente un diseño que permita resistir el comportamiento del océano. Viña del Mar ya asume un cambio en el comportamiento de sus costas, y quizá también puede redundar en Iquique más adelante, y luego convierta la playa guarida de espigones.
Sin embargo, también existen otras playas, y las tenemos a trasmano, son las playas del sur de la ciudad, en que cualquier turista que viene queda encantado que sean vírgenes y no urbanizadas como balneario, sin embargo, igualmente se deben mejorar las implementaciones de las playas y la conectividad del transporte público y accesos peatonales.
La mejor manera de descongestionar es que tengamos transporte público para realizar paseos a estas playas, y accesibilidad en caminar hacia ellas, y por, sobre todo, una infraestructura que motive a mantener las playas, además de limpias, esas playas son una potencialidad que la ciudad aún no ha sabido explotar turísticamente, las opciones son variadas además de los espigones.
"La mejor manera de descongestionar es que tengamos transporte público para realizar paseos a estas playas".
Bernardo Alcázar,, presidente de la Cámara Chilena de la Construcción- Iquique"