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Paisaje desértico fue inspiración para la artista sureña Patricia Ríos

En la Casa de la Cultura de Iquique combina el reciclaje con los acrílicos para retratar los elementos de Tarapacá.
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Francisca Cabello Iriarte

Las paredes de la Casa de la Cultura de Iquique se empaparon de los acrílicos de Patricia Ríos Morandé, historiadora del arte, pintora y telarista. En esta oportunidad, se exhibe la variedad de lienzos que esta artista ha pintado y decorado, y que tienen como concepto general las tonalidades y la fuerza de la desértica geografía de la Región de Tarapacá.

Esta inspiración que le atrajo la idea de retratar el desierto se generó porque "estuve viviendo cinco meses en la caleta Chanavayita. Allí empecé a recorrer y me enamoré del lugar. El desierto es sublime, seductor, erótico, cambia de movimiento, es hermoso", relató.

En un recorrido por el salón se puede apreciar cada una de sus creaciones que no solamente son en base a telas y acrílicos, sino que a la lana. Los telares son parte también de esta muestra y es el resultado de un trabajo que comienza desde la crianza del animal.

"Yo preparo la lana de todos los telares. Las ovejas son de crianza mía. Se estilan en el campo, se urde, yo las tiño y uso solo productos vegetales", manifestó Ríos, quien luego las trata con detalles en cobre, pita sisal y redes de la misma costa nortina que va recolectando.

Reciclaje

El tema de la reutilización de material se impregna entre sus creaciones, ya que para esta telarista criada en Puerto Varas "es una labor del artista reciclar", puntualizó.

Su casa-taller está en Valparaíso, donde se inspira para pincelar cada lienzo. Uno de ellos es la Pachamama. Allí retrata, según su percepción, "a la mujer del desierto" que está representada con llamativos colores "porque hay que aprender a mirar. Algunas veces uno ve pero no mira, todos estos colores son de la alegría del desierto, de la gente que es como un color más neutro que la tierra, la arena que hay acá, la mujer le pone mucho color a su vestuario, y ella representa todo lo que es colorido en el desierto", expresó.

Iquique

La apuesta por retratar por Tarapacá se debe a que "he estado todo un año recorriendo Chile y ahí tomo los temas que me impregnan y que me hacen sentir, me inspiran y esto yo se lo debía a Iquique porque esta ciudad ha sido muy gentil conmigo", confesó.

Entre sus cuadros se puede apreciar en su mayor esplendor las arenas del desierto, el que ha sido pintado "como la mayoría de la gente lo ve, pero además tiene muchas luces que creo hacen la diferencia de una pintura en movimiento porque el desierto siempre está en movimiento", finalizó la artista.

"Yo preparo la lana de todos los telares. Las ovejas son de crianza mía (...) y uso solo productos vegetales".

Patricia Rojas Morandé"