Alerta con la depresión estacional
El año ha transcurrido con gran fluidez, dando paso a la llegada de la primavera y con ella las temidas depresiones estacionales. Según especialistas, el comienzo de esta estación, significa para muchas personas, sumirse en cuadros depresivos, época en la cual ha además se registra la mayor tasa de suicidios.
La vida moderna, con una alta dosis de estrés, causas caos e incertidumbre en todos los aspectos de la existencia cotidiana, afectando nuestro ambiente laboral, familiar y social. Nuestra región se ha transformado en una ciudad muy caótica.
Entre la delincuencia, los eternos "tacos" en horas peak, la agresión constante entre transeúnte y automovilistas y la angustia por estar inmerso en un ambiente laboral que no es grato, nos está pasando la cuenta.
Son muchas las familias que dentro de su núcleo, por lo menos uno de sus integrantes está transitando por los complicados caminos de la depresión y como ya hemos comentados en otras columnas, está patología de no ser detectada correctamente, la persona que la padece puede atentar contra su propia vida.
Agregándose al posible estrés el tópico de las exigencias laborales las que muchas veces sobrepasan la capacidad de nuestro organismo para reaccionar en forma natural. Se agrega a ello el miedo constante a ser despedido y la escasa flexibilidad de los procesos productivos y creativos.
Se debe tener en consideración los siguientes síntomas para saber si estamos padeciendo este tipo de alteración física y mental de tipo estacional.
Una de las principales señales de este tipo de afección mental, se manifiesta en agotamiento tanto físico como mental, produciéndose un bajo rendimiento laboral e irritabilidad. Asimismo a los síntomas descritos, se agregan los cambios bruscos del ánimo, sensación de inseguridad, angustia y en casos extremos, depresiones que de no ser tratadas a tiempo, pueden alterar la vida familiar de quien las padece.
A raíz de ello se hace necesario aplicar programas preventivos, encaminadas a crear mayor flexibilidad en la vida cotidiana de los trabajadores y sus familias a objeto de minimizar los efectos y síntomas descritos, ya que este tipo de estrés nos afecta en todos los ámbitos de nuestro quehacer.
"Se manifiesta en agotamiento tanto físico como mental, produciéndose un bajo rendimiento laboral e irritabilidad".
Dr. Jorge Font, MBA Diplomado en Adicciones U.C."