Parapente: la sensación de volar como aves
La zona de despegue está en Alto Hospicio y el aterrizaje es mirando el mar de Playa Brava.
E n Alto Hospicio está ubicada el área de lanzamiento en parapente, un deporte extremo que sumó puntos para que Chile se ganara, en 2016 y 2017, el premio World Travel Awards como mejor destino de turismo de aventura.
Desde Los Ángeles, al sur del país, Pablo Millar visitó por primera vez Iquique y no pudo aguantar la tentación de experimentar el vuelo en parapente.
"Fue espectacular, es una sensación de relajo, además de poder ver el paisaje, el desierto y la playa a la vez, muy lindo", así describió su experiencia.
"Hay que repetirla y hacerla un millón de veces, si es posible", dijo mientras se quitaba el arnés, minutos después de haber aterrizado en Playa Brava, lugar permitido en verano.
"Yo soy grande, peso 118 kilos y mido 1,89 centímetros, el instructor me dijo que el límite de peso para volar es de 120 kilos, así que estoy dentro de lo permitido", explicó Millar, quien nunca imaginó lo bien que se sentiría volando como si fuera un ave.
Horas de vuelo
Espinoza es instructor de la empresa "A puro vuelo" y explicó que ellos deben cumplir un mínimo de 10 horas de vuelo para obtener la licencia que otorga la Dirección de Aeronáutica Civil.
Cuenta que en temporada de verano vuelan 3 o 4 veces al día, todo depende de las condiciones del viento, porque "si es muy fuerte no se puede volar, pero el mejor horario es de 10 a 14 horas".
"Nosotros buscamos al turista en su hotel, lo llevamos al lugar del despegue y por el camino vamos haciendo la inducción, porque la gente lo compara con el paracaídismo y es completamente diferente, utilizamos un planeador, en vez de bajar avanzamos", destacó.
El paseo dura entre 20 y 30 minutos, incluye sesión fotográfica e implementos de seguridad.