Karina Sánchez
Tamentica está ubicada en el curso medio de la quebrada de Huatacondo, a 207 kilómetros de Iquique, y presenta medio centenar de bloques de piedra, concentrados en un área aproximada de 200 metros cuadrados.
Sitiado dentro del árido ambiente de la Pampa del Tamarugal, en la comuna de Pozo Almonte, Tamentica fue un lugar de detención obligada para quienes hacían la ruta entre la costa y las tierras altas.
Sus petroglifos, tallados entre los años 100 y 1.500 DC, parecen haber sido parte de los rituales de viaje de los caravaneros, quienes encontraban allí agua, vegetación y refugio para continuar la travesía.
Los petroglifos cubren prácticamente toda la superficie de las gigantescas rocas y fueron grabados en bajorrelieve, combinando técnicas de percusión en área y en surco.
La calidad de la roca, la fineza de la técnica y la variedad de motivos, convierten a este yacimiento en uno de los más importantes de la zona norte de Chile.
Formas
Predominan las figuras de cóndores con las alas desplegadas y camélidos con sus cuatro extremidades, en diversos grados de estilización; también hay representaciones de cuadrúpedos no identificados, felinos, lagartos, batracios, serpientes, peces y arañas; así como diferentes figuras geométricas, incluyendo grecas, cruces, espirales, círculos, líneas paralelas ondulantes y en zigzag, entre otras formas.
Destacan también figuras humanas con apéndices en la cabeza de tamaño mayor al resto, otras más pequeñas con el mismo tocado, los brazos doblados hacia arriba y vestidas con faldellín, individuos cargando bultos en la espalda, caravaneros y balsas de cuero de lobo con tripulantes arponeando peces o pescándolos con sedal.
A juzgar por la variedad de temas tratados, la actividad rupestre tuvo lugar a lo largo de los últimos 1.500 años de la cultura prehispánica.
Evolución
Al principio, este afloramiento rocoso formaba parte de la naturaleza, luego el ser humano lo integró dentro de su cultura, con la creación del arte rupestre, y lo convirtió en un lugar sagrado, plasmando imágenes que tenían sentido dentro de su cosmovisión, que comunicaban ideas y pensamientos.
En tiempos históricos se pierde el sentido sagrado de este espacio y el yacimiento es utilizado para la extracción de rocas utilizadas en labores mineras de pequeña escala y para mantener animales domésticos.
En la actualidad el yacimiento de Tamentica adquiere nueva importancia en el sentido turístico, ya que es posible admirar los grabados en la roca con un valor estético, aunque no comprendamos exactamente lo que quiso expresar el artista prehispánico.
Todo esto se ve coronado por una profusa actividad cultural, que se proyecta hasta el presente y en la que destaca una rica tradición festiva y ceremonial.