Secciones

Condenan a joven que le robaba los celulares a mujeres

El acusado deberá cumplir una pena de 8 años de prisión, pues se le vincula a 12 delitos del año pasado.
E-mail Compartir

Karina Sánchez

Un tatuaje en el cuello y su manera de vestir, además de la funa a través de las redes sociales donde se viralizó la imagen de Claudio Páez Miranda mientras robaba a una de sus víctimas a través de la ventana de un colectivo, fueron las claves para que lo detuvieran en diciembre de 2017.

Finalizadas las investigaciones y luego de permanecer en prisión preventiva por alrededor de cinco meses, ayer el imputado fue condenado por el juez a la pena efectiva de 8 años de presidio.

El hombre, de 32 años, fue acusado de participar en varios asaltos contra mujeres, a quienes les sustraía principalmente sus teléfonos celulares.

La identificación y detención de Páez se produjo gracias a una investigación de la Unidad de Análisis Criminal y Focos Investigativos (SACFI) de la Fiscalía y la Policía de Investigaciones (PDI), que logró ubicar a varias víctimas que vieron su foto en las redes sociales, lo reconocieron y realizaron la respectiva denuncia.

Asalto a colectivos

En un juicio abreviado, el fiscal de foco Oscar Sáez explicó que el acusado asaltaba mujeres que esperaban locomoción o que iban como copilotos abordo de vehículos, a quienes les robaba los teléfonos celulares que llevaban en sus manos o sus carteras.

Se pudieron acreditar específicamente 11 delitos de robos por sorpresa y un robo con intimidación, hechos que ocurrieron el año pasado, varios de ellos en la intersección de calles Héroes de la Concepción con Tarapacá, según se pudo conocer en la audiencia.

Además, cuando el imputado fue detenido, se le encontraron prendas de vestir y zapatillas que fueron reconocidas por las afectadas.

Antecedentes

"Es importante que se logró sacar de circulación a un sujeto que llevaba varios meses cometiendo robos en la ciudad, principalmente en esquinas muy concurridas donde el tráfico de autos y personas le permitían huir con rapidez tras el robo y no ser detenido", explicó el fiscal Sáez.

El persecutor agregó que "el trabajo de análisis nos permitió unir varias denuncias, trabajarlas en conjunto, identificar al sujeto y ubicar a las víctimas para que lo reconocieran, pudiendo acreditar su participación en todos esos ilícitos".

También se conoció que el acusado tenía antecedentes por el delito de microtráfico de drogas y porte ilegal de armas de fuego.

Finalmente, el juzgado de garantía de Iquique resolvió condenar a Pérez a las penas efectivas de 4 años de presidio por los delitos de robo por sorpresa y 4 años por el robo con intimidación.

4 años de presidio por robo por sorpresa y cuatro años más por robo con intimidación es la pena que deberá pagar.