Pamela Serey A. - La Estrella
Entre insultos y escupitajos se fue ayer Jorge Sampaoli, entrenador de la selección argentina, del Estadio de Nizhni Nóvgorod, tras la contundente derrota ante Croacia, por 3-0.
Fue un resultado inesperado, tanto como el primer gol de los croatas. A los 53 minutos, Willy Caballero recibió un pase, con tiempo y espacio, pero su cálculo no funcionó y terminó dándole un pase servido a Ante Rebic, quien le pegó de volea y la pelota pasó por arriba del meta. Un golazo.
Después de ese tanto, Argentina intentó ir arriba. Sampaoli decidió entonces hacer un cambio. Sacó a Kun Agüero y metió a Gonzalo Higuaín. Nueve por nueve. Una decisión que fue criticada por los medios argentinos. Lo compararon con Marcelo Bielsa, cuando, en el Mundial de 2002, nunca hizo jugar juntos a Hernán Crespo y a Gabriel Batistuta. "Y nos volvimos en primera ronda", dijo el medio trasandino Olé.
Pero los cambios no fueron suficientes y Croacia terminó enterrando a la albiceleste. A los 80', los hinchas argentinos vieron cómo Luka Modric aumentaba la ventaja con un potente e inatajable remate desde el borde del área.
Los dirigidos por Sampaoli cayeron en la desesperación. Tanto así que, a los 85', Nicolás Otamendi fue sancionado con amarilla, porque luego de cometer una falta contra Ivan Rakitic, pateó la pelota directo a la cabeza del compañero de Messi, en el Barcelona. Pero no fue el único que perdió los estribos.
También lo hizo Sampaoli, a los 71', cuando Sime Vrsaljko no quiso sacar un lateral, estando al lado de la pelota y esperó a que un compañero llegara a hacerlo. "Cagón, cagón, cagón...", le gritó el DT.
Y cuando ya se jugaban los descuentos, Ivan Rakitic anotó el 3-0 definitivo, luego de varios pases que dejaron a la defensa de Argentina totalmente entregada.
Y así como llovieron las críticas a Sampaoli, también llegaron a Lionel Messi, recordando que el volante erró un penal que pudo dar el triunfo (y los tres puntos) a la albiceleste, ante Islandia. Messi tuvo una opción al comienzo del partido (11') cuando, tras recibir un gran pase en el área, no alcanzó a conectar.
En total, Messi tocó la pelota 49 veces en todo el partido, según los datos de Opta: 20 veces en el primer tiempo y 19 en el segundo.
Con este resultado, Argentina suma sólo un punto y además tiene -3 en la diferencia de goles. Está, por tanto, obligada a vencer ampliamente en su último partido y depende de los resultados de los otros encuentros. Es más, Sampaoli habló como si estuviese despidiéndose del mundial, en la conferencia de prensa de ayer.
"Le pido disculpas a la gente que hizo el esfuerzo por estar acá. Tenía tanta ilusión como ellos. Intenté hacer lo mejor posible", dijo. También defendió al meta por el error del primer tanto: "Yo soy el responsable de tomar las decisiones. No es humano echarle la culpa a Caballero".
Luego se responsabilizó por la derrota. "Estaba muy esperanzado y tengo mucho dolor por la derrota. Seguramente no leí el partido como correspondía. El plan del partido no resultó. Hay que esperar y apostar a la mínima posibilidad que queda", cerró.
Sobre el análisis del DT fue consultado Agüero en zona mixta y respondió muy molesto: "Que Sampaoli diga lo que quiera".
49 veces tocó la pelota Messi en todo el partido: 20 en el primer tiempo y 19 en el segundo.