Ramaderos ofrecen productos típicos con precios que parten en los $1.500
Visitantes pueden optar por variedad de platos y tragos. Locatarios esperan un buen cierre de Fiestas Patrias.
"Empanadas, pastel de choclo, anticuchos, terremoto", se oye al ingresar y recorrer las ramadas instaladas en la intersección de Tadeo Haenke con Héroes de La Concepción donde la venta de comida y tragos con motivo de las Fiestas Patrias partió la noche del viernes y ayer ya entregaba un panorama auspicioso para los locatarios.
En dicho lugar se pueden encontrar productos típicos con precios que parten en los 1.500 pesos como es el caso de las empanadas de pino al horno y las brochetas. Sin embargo, desembolsando 500 pesos más se puede disfrutar de un pastel de choclo o una humita e incluso un plato de porotos con rienda.
Recorriendo las fondas es posible encontrar calapurca a 3 mil pesos, aunque para degustar de un costillar hay que pagar el doble ya que la porción con dos agregados a elegir cuesta 6 mil pesos.
Elizabeth Piérola lleva más de 40 años con la fonda "Malenita" que fundó su madre. Si bien comentó que la noche del viernes las ventas estuvieron "lentas", ayer la demanda comenzó a aumentar ya que entre las 10 y las 15 horas le compraron 50 platos de calapurca y otros 30 de costillar de cerdo.
Y es que afirmó que su secreto fue abrir temprano. "A las 10 yo era la única que tenía abierto, esa es la cábala", comentó Piérola quien al día prepara 200 platos de cada comida.
Pamela Gómez acudió ayer con su familia a almorzar a las ramadas y encontró precios más económicos que el año pasado. Fue así que la cuenta que pagó por cinco platos de comida y bebidas fue de $19.500. "Encontré costillar a 4 mil pesos y el año pasado lo tenían a $6 mil, el pollo está a $3.000", precisó.
Variedad
El olor de la carne a la parrilla envuelve a quienes caminan por cada pasillo mientras eligen qué degustar. Pero, así como hay comidas típicas, también se ofrece pizza, sopaipillas, chorrillanas, yoguis, y chicharrón de carne de llama.
Pamela Escobar, quien en febrero pasado dejó Concepción para radicarse en Iquique, comentó que le llamó atención encontrar mayor variedad de comida y con influencia de países vecinos. "Acá hay muchas cosas que allá no había visto, por ejemplo, vi que una señora vendía anticuchos con huancaína", indicó.
Eso sí dijo que en las ramadas de Iquique los precios son más caros ya que en su ciudad de origen los anticuchos se venden a 800 pesos y aquí están casi el doble o más.
Terremoto
Sin embargo, no todo es comida ya que los tragos también se ofrecen en variedad de tamaños y presentaciones. Es el caso del terremoto cuyo precio por medio litro varía entre los 2.000 y 3.000 pesos, y puede tomarse en vasos desechables, jarras, copas, entre otros tipos de envases.
Marcelo Pollini, quien por segundo año se instala en las ramadas, dijo que en su primer día de funcionamiento logró vender 100 terremotos.
"18 para todos"
En las ramadas de la Municipalidad de Iquique, instaladas en el estacionamiento de la Unap y denominadas "18 pra todos", la tarde de ayer en un solo puesto ofrecían comida ya que el resto recién estaba instalándose. Esto fue beneficioso para el conjunto folclórico Savia Nueva que vendió menús consistentes en pollo o costillar con arroz y papas mayo a $3.500.