Advierten alza de casos de demencia en Tarapacá
La región alcanzó una tasa de 48,48 casos por cada 100 mil habitantes. El Alzheimer es la enfermedad más común.
"Un paciente demente es una persona incapaz de manejar su propia vida y requiere de asistencia", dice Andrés Ceballos, médico de atención primaria, al aclarar que no se trata de locura, sino de un deterioro de la memoria, del intelecto, comportamiento y de la capacidad para realizar actividades de la vida diaria.
En Tarapacá, al igual que a nivel nacional, en los últimos dos años la tasa de demencia ha ido en aumento. Así lo reporta la Seremi de Salud la cual evidencia que mientras en 2015 en la región había 43,06 casos por cada 100 mil habitantes; el 2017 pasó a ser 48,48.
Y si bien existen distintos tipos de esta enfermedad como son demencia con órganos de Lewy, vascular, frontal-temporal y Alzheimer, Ceballos afirma que este último concentra el 75% de los casos.
Entre los factores de riesgo que principalmente conducen a desarrollar Alzheimer están -según precisa el médico- la edad, el sexo femenino, pocos años de escolaridad, accidentes vasculares o traumatismos craneoencefálico, aumento de homocisteína (aminoácido que se produce en el cuerpo), y la presencia de la Apolipoproteína E4 (proteína que intervienen en el metabolismo de las grasas).
Al hablar de edad, Ceballos precisa que los casos de demencia principalmente se presentan en personas mayores de 65 años, aunque existen casos más prematuros.
Sin embargo ¿cómo se puede prevenir la demencia? El profesional explica que lo más eficaz es llevar una vida sana que involucre no solo realizar actividad física sino también ejercitar la mente, además de interactuar con el medio.
"No hay peor cosa que a un adulto mayor que se jubila, condenarlo a la mecedora, a tejer, a descansar; un adulto mayor tiene que ser funcional, que participe con la familia, que planifique, que vaya a la playa, que tenga ganas", advierte.
Envejecimiento
El referente del programa de Salud Mental de la Seremi de Salud, Juan Francia, indica que el incremento de casos de demencia en la región y el país guarda relación con que hoy en día las personas viven muchos más años.
"¿Eso qué implica? En la tercera edad generalmente empiezan a aparecer enfermedades de carácter crónico que pueden, a su vez, ser factores de riesgo para desarrollar una demencia, por ejemplo", precisa.
Ante esta realidad, el 2017 el Ministerio de Salud lanzó el Plan Nacional de Demencia que apunta a destacar la necesidad de contar con diagnósticos oportunos, disminuir los estigmas sobre pacientes con demencia, capacitar a los equipos de salud así como docentes y alumnos de esta área en el tema, y reducir la carga del cuidador.
Manuel Fernández, seremi de Salud, afirma que para lograr esto se trabaja en conjunto con la atención primaria y los servicios de Salud, Adulto Mayor, y de la Discapacidad a fin de prevenir esta enfermedad, enfrentar el envejecimiento de la población, y preparar médicos en el ámbito de la geriatría.
En ese contexto, ayer en el aula magna de la Universidad Arturo Prat, se desarrolló la jornada denominada "Desde el envejecimiento normal a la demencia" la cual convocó a profesionales de la salud, así como a usuarios y cuidadores de la región.
Síntomas
Los síntomas que alertan algún tipo de demencia son: problemas de memoria, alteración viso espacial (dificultad para reconocer personas), alucinaciones, delirio, problemas con el movimiento, entre otros. "Cuando tú vez que el papá, de la noche a la mañana, perdió las ganas de disfrutar de los asados, de planificar el viaje, estos son los síntomas de una de las esferas de los dominios, en este caso la función ejecutiva", indica Andrés Ceballos al explicar que la demencia no solo guarda relación con pérdida de la memoria.
56,65 por ciento fue la tasa de demencia nacional en 2015. El año pasado llegó a 77,71.