Científicos estudian 3 pueblos de Huara para conocer sus orígenes
En terreno se trabajó junto a los pobladores de estos lugares, quienes esperan realzar su historia.
Las historias no contadas de los poblados de Huasquiña, Sipiza y Sotoca podrán ser reveladas a través de una investigación científica que tiene como fin obtener información certera sobre características geográficas, geológicas, históricas, antropológicas, jurídicas y socioeconómicas de estos sectores de Huara.
Dicha iniciativa se ha desarrollado gracias al Convenio para la Transferencia de la Propiedad Comunitaria 2018 que desarrolla la Universidad de Tarapacá (UTA) y la Corporación Nacional de Desarrollo Indígena (Conadi), que han estado recopilando la información en terreno.
Pobladores
En una primera instancia en la localidad de Huasquiña se realizaron trabajos por medio de entrevistas, elaboración de árboles genealógicos, reconocimiento in situ y cartografías participativas que fue realizado por un equipo de profesionales del Departamento de Ciencias Históricas y Geográficas de la UTA.
Paulina Martínez, docente de la carrera de Trabajo Social y quien participa en este proyecto, dijo que "realizamos una recolección de antecedentes para determinar cuál es la ocupación histórica territorial y ancestral de los pueblos originarios que se ubican en la Quebrada de Tarapacá. Para eso, el trabajo de campo que desarrollamos se llevó a cabo directamente con la comunidad, haciéndolos partícipes de la construcción de su propia historia, pues ellos son los protagonistas y principales actores de este trabajo".
Así lo afirmó Mercedes Vizcarra, presidenta de la comunidad de Huasquiña, quien agradeció este proyecto porque "estas cosas le dan vida a nuestros pueblos, entonces rescatamos nuestras costumbres y no son olvidan estos lugares, así que para nosotros es muy importante que siempre tengamos presente nuestras raíces", expresó Vizcarra.
Por otra parte, la geógrafa del Departamento de Ciencias Históricas y Geográficas de la UTA, Paulina Ponce, realizó una cartografía participativa para obtener datos que "permiten fijar el nombre de quebradas, quebradillas y otros de sitios de interés simbólico para los pobladores, que generalmente no se encuentra en otras cartas, como por ejemplo la del Instituto Geográfico Militar", dijo.