El sistema de pensiones chileno experimentará certeros ajustes, según la reforma planteada por el Presidente Piñera en cadena nacional. El aumento en el Pilar Solidario beneficiará a las personas de pensiones más bajas, con un alza de 40%, focalizando correctamente los recursos en quienes más lo necesitan.
La gradualidad del aumento en el porcentaje de cotización ayudará a que el mercado laboral logre adaptarse a este nuevo costo al contratar.
Es de esperar que la oposición colabore y aporte propuestas reales al proyecto. Debiese mirar el caso holandés, que posee un sistema muy parecido al nuestro, pero con una robusta fiscalización al cotizar y la cultura del ahorro. Va siendo tiempo que la izquierda abandone proponer el nostálgico, fracasado e inviable sistema de reparto para los tiempos que corren, que además quebró a España y Argentina.
Halloween: El día después
La celebración de Halloween es una fiesta tradicional del hemisferio norte que ya se ha instalado en nuestro medio. Sin embargo, el consumo de golosinas en exceso no hace sino preocuparnos por las alarmantes cifras de obesidad y sobrepeso, especialmente en niños y adolescentes chilenos.
Para quienes tienen niños, más que no sumarse a esta fiesta, la estrategia apunta a evitar el consumo desmedido de golosinas con alto contenido de azúcar y grasas, que pueden producir cuadros de indigestión o molestias gastrointestinales, tales como vómitos o diarreas, y, sobre todo, enseñarles a nuestros hijos que la clave está en la ingesta moderada y ocasional de este tipo de productos.
Los padres deben seguir ciertas reglas básicas para que sus hijos disfruten alegremente, pero de manera saludable la fiesta de Halloween. Primero, preferir caramelos con menos colorantes y evitar los productos rellenos con soda o que dejan a los niños las lenguas azules o verdes, por ejemplo. En niños menores es mejor utilizar los dulces tipo gomitas, ya que es menor el riesgo de que se ahoguen como podría suceder con los caramelos 'duros'.
No se deben sobrepasar las cantidades aconsejadas: fraccionar la entrega, dárselos de a poco, y explicarles el motivo del por qué el consumo de golosinas y dulces debe ser moderado, para fomentar en ellos la autorregulación.
Además, se debe planificar una sesión de actividad física aeróbica, caminata o bicicleta para el día posterior al consumo de estos productos; no dar dulces al día siguiente de la fiesta y, si quedan, desecharlos. Finalmente, alternar su consumo con alimentos saludables, frutas y lácteos semidescremados.
De este modo, podemos sumarnos a esta festividad, sin lamentar, el día después, sus consecuencias para la salud y contribución a los ya preocupantes índices de exceso de peso en nuestros niños.
Jorge Peña Araos
Director de la Escuela de
Nutrición y Dietética
Universidad Central
José Luis Trevia
Estudiante de Derecho
Universidad de Valparaíso
