Resultados Ley de Etiquetado
Un estudio dado a conocer durante la semana mostró los efectos, a un año de la entrada en vigencia de la Ley de Etiquetado, que han tenido el uso de los sellos de advertencia que se han puesto a los alimentos en el comportamiento de compra de los consumidores.
La investigación fue realizada por académicos del INTA de la Universidad de Chile, además de profesionales de las universidades Diego Portales y de Carolina del Norte, y sus resultados muestran que en general, los objetivos por los que fue planteada y promulgada esta ley, se estarían cumpliendo.
La idea era que la población supiera lo que estaba consumiendo y los efectos que podría tener en su salud. Y aunque en principio se le calificó como una norma muy estricta, finalmente la población comenzó a entender los contenidos de azúcar, calorías o grasas saturadas que podían ingerir, y cómo aquello respondía a sus requerimientos, o simplemente a sus preferencias.
La investigación da cuenta de que, junto con que la industria alimentaria reformuló muchos de sus productos, reduciendo grasas, azúcar o sodio, también se bajó el contenido de azúcar en bebestibles, lácteos y cereales de desayuno entre 20% y 35%. Junto con eso, se redujo entre 5% y 10% la cantidad de sodio en quesos y cecinas.
Respecto del comportamiento de los consumidores es que la compra de bebestibles azucarados disminuyó en un 25% y también bajó en 46% la exposición de niños preescolares a publicidad de alimentos con advertencia. En el caso de los adolescentes, la caída llegó al 62%.
Todos estos esfuerzos tienen una gran meta, que es mejorar la situación nutricional en la que se encuentra hoy nuestro país. Chile lidera los índices de obesidad en Latinoamérica. Más del 70% de la población padece de exceso de peso, y un 11% de los niños y niñas menores de seis años son obesos.
Una de las maneras de combatir estos problemas, es que la población sepa a lo que se expone cuando consume determinados alimentos, si es que los mismos no responden a sus requerimientos. Se trata de una conciencia que redunda en beneficios personales y a la salud pública, donde las familias cuentan con lo necesario para tomar la decisión de optar por conductas de alimentación saludable.
"Las familias cuentan con lo necesario para tomar la decisión de optar por conductas de alimentación saludable.