Adiós Genovés
La bohemia local al igual que la ciudad que la sostiene ha experimentado importantes transformaciones. Vivir la noche ya no es lo mismo que hace medio siglo atrás. Los bares, por ejemplo, en su configuración han sufrido profundos cambios. Y estos tienen que ver con el consumo, la estética y por la presencia de vanguardias artísticas que suelen ocupar estos espacios. El Democrático es un ejemplo de lo anterior.
El cierre del Genovés conocido como el bar de los deportistas expresa el fin de un ciclo. Esta taberna de los hermanos Solimano, animó la bohemia en un tramo urbano que no se puede entender sin la desaparecida Casa del Deportista.
Tributo a la migración italiana se hizo parte del imaginario bohemio de una ciudad que tiene los días más cortos que sus noches. En su amplio salón se habrán tejido miles de historias y leyendas. Estas últimas suelen ser más interesantes que las primeras. Luis y Amadeo Solimano supieron forjar una tradición, y sobre todo ganarse el aprecio y respeto de los parroquianos.
Producto de la Zofri, la geopolítica de la bohemia empezó a cambiar. El whisky y ahora el ron ha reemplazado a la tradicional ponchera compuesta por el Pisco y las bebidas colas. En los 80 aparecieron una serie de locales nocturnos que le disputaron la hegemonía al bar de la esquina. Muchos de estos nuevos bares desaparecieron. Otros como el Curupucho, bisagra entre el Iquique de ayer y el de hoy, pasaron la prueba de fuego.
La agonía del Genovés empezó tal vez cuando murió Luis, el presidente del Maestranza. Amadeo, ya se veía cansado y parco en sus gestos. Para los criados en los barrios del norte de Iquique, este bar es y será una leyenda. Pero quedan otros, vigentes e invisibles. Uno de ellos, el Acapulco. Pero tal vez, al bar que le queda el alegre derecho de continuar la tradición sea el Dándalo, el bar de matarifes y de pescadores, sede social del barrio Matadero en la que se organizaba el carnaval.
Con el cierre del Genovés, se nos va una de las tantas y festivas señas de nuestra identidad.
"Los bares, por ejemplo, en su configuración han sufrido profundos cambios. Y estos tienen que ver con el consumo, la estética (...)".
Bernardo Guerrero, Sociólogo"