La habilitación de un nuevo acceso entre las comunas de Iquique y Alto Hospicio es, sin duda, un beneficio para todos los tarapaqueños, sobre todo para los que habitualmente se movilizan entre ambas ciudades por trabajo u otros motivos.

Ayer, este mega proyecto tuvo un hito importante por comenzar a operar un tramo del segundo acceso de Iquique a Alto Hospicio y viceversa, desde el empalme sur de la avenida Las Américas hasta Bajo Molle.

Al tratarse de una marcha blanca, hubo dos horarios de tránsito, uno en la mañana de 8 a las 10, y otro en la tarde de las 18 a las 20 horas. Los conductores que pudieron desplazarse tuvieron que hacerlo a una velocidad máxima de 50 kilómetros por hora.

La habilitación completa de la ruta, con un valor de 98 millones de dólares, está pensada para 2023. Ahora las autoridades y expertos se preparan para el inicio definitivo del primer tramo, que está fechado para el próximo 5 de marzo, en que la vía podrá ser usada de subida y bajada en el mismo horario.

Antes de darle "el vamos" a la marcha blanca, varias autoridades y servicios, como Bomberos, Carabineros y personal del Servicio de Atención Médica de Urgencia (Samu), que acuden a los accidentes vehiculares en las carreteras, estuvieron presentes en un recorrido por el sector para conocer las condiciones del acceso.

De esa reunión se desprendieron varias observaciones, por ejemplo las de Bomberos, que evidenciaron "detalles" que hay que resolver para optimizar esta ruta, que es considerada por el Gobierno como la obra de infraestructura vial urbana más grande de Chile.

Hay aspectos, entonces, que hay que mejorar para que la seguridad sea un atributo permanente del nuevo acceso. Por ejemplo, según evidenció Bomberos, debe optimizarse la señal telefónica para que exista conexión en todo el tramo; además es necesario una mejor demarcación de la calzada y la instalación de señales de tránsito que también sirvan de referencia para los accidentes de tránsito.

Son desafíos que deben estar en la carpeta de las autoridades para que esta obra siga siendo un proyecto beneficioso para los tarapaqueños que durante varios años demandó una mejor ruta.

"Son desafíos que deben estar en la carpeta de las autoridades para que esta obra siga siendo un proyecto beneficioso".

Las caras felices se repitieron ayer en la entrega de viviendas de la reconstrucción en Alto Hospicio, a casi cinco años desde el megasismo. Pasado ese tiempo, es hora de que todos los afectados tengan sus casas para cerrar un ciclo.

Trabajar por Tarapacá

Entre acusaciones y hasta gritos terminó una actividad que reunió a autoridades regionales en el nuevo acceso entre Iquique y Alto Hospicio. Más allá de las diferencias y los planteamientos, es de relevancia que todos superpongan el bien de los tarapaqueños y su calidad de vida.

Días nublados

Días soleados son la oferta que ofrece Iquique a sus habitantes y turistas en temporada estival. No obstante, el clima está enrarecido y las nubes reinan el cielo durante las tardes. Ello no hace desaparecer el calor ni tampoco las ganas de disfrutar de las playas.

Recientemente se han cerrado las matrículas de las universidades para los nuevos postulantes, donde un porcentaje de ellos decidieron por carreras científicas. No hay nada más maravilloso en la vida que ser científico, incluyo -por cierto- a las humanidades. Además, trabajar en lo que más se quiere es hacer realidad un sueño. Sin embargo, el camino que los jóvenes que desean ser científicos tienen por delante es muy largo y pedregoso.

Por lo general, los estudiantes que se inclinan por las disciplinas científicas suelen ser estudiosos, de espíritu inquieto y motivados por la curiosidad. Es fascinante verlos en actividades de Explora Conicyt, donde se lucen como verdaderos científicos, filósofos o historiadores. Se destacan por sus preguntas que ponen en dificultad a los maestros. El primer escollo que encuentran son los altos puntajes que se exige para ingresar a estas carreras. Alcanzada la licenciatura, lo natural es que continúen en algún magister y/o doctorado. En esta etapa no existe la gratuidad y deben entonces competir por una beca. Para alcanzar esas becas deben ser los mejores de su generación en la universidad.

Luego de esa gran experiencia que significa el doctorado, nuestro país no tiene una política adecuada de inserción de ese "capital humano avanzado". Falta una definición de áreas estratégicas en la política de becas. Aquellos científicos ya investidos de doctores que desean una carrera académica deben prepararse para seguir caminando y compitiendo varios años más. Les espera la realización de un post-doctorado y comenzar a ganar los primeros proyectos. Quizás la tarea más ardua es aquella de ser conocidos en sus campos disciplinarios a través de artículos, entrevistas científicas y presentaciones en congresos. Todo es a escala planetaria. A esa altura, ya han pasado dos décadas desde que se matricularon en la universidad.

Nuestro sistema de educación superior -en lo que a ciencia y tecnología se refiere- responde a una estructura de país subdesarrollado. Chile forma parte de las naciones de la Ocde, que representan el 80% del PIB mundial y se caracterizan por su inversión en ciencia y tecnología, nuestro país es el segundo que menos invierte. Esperemos que ello se revierta con la creación del Ministerio de Ciencia, Tecnología, Conocimiento e Innovación, y tengamos por fin una estrategia desarrollo, donde la inteligencia de nuestros jóvenes científicos se despliegue en toda su magnitud.

"Nuestro país no tiene una política adecuada y eficiente de inserción de ese 'capital humano'".

Sergio González Miranda, Premio Nacional de Historia"