Condenado por apuñalar a hombre en la vía pública
El inculpado de nacionalidad cubana atacó a su víctima con un cuchillo carnicero.
Un hombre de nacionalidad cubana identificado como Marcos Alberto Ortiz Díaz, fue condenado a la pena de cuatro años de presidio por su responsabilidad como autor del delito de homicidio en calidad de frustrado, en perjuicio de la víctima identificada como E.P.B.P.
Los hechos por los cuales fue acusado por parte de la Fiscalía ocurrieron el día 24 de marzo de 2018, en horas de la noche, alrededor de las 23:00 horas. Según expuso el fallo condenatorio, "la víctima luego de concurrir al establecimiento (nocturno), ubicado en Calle Tarapacá Nº 53 de Iquique, salió al exterior de dicho local para luego intentar ingresar nuevamente, momentos en que se produce una discusión con los guardias del local quienes no le permitieron el ingreso".
"Así en los momentos que la víctima se retiraba, el acusado premunido de armas corto punzante atacó a la víctima, la cual cae al suelo, procediendo reiteradamente a agredir a la víctima dándole una estocada en la zona del tórax, provocándole una herida punzo cortante subclavicular derecha, no penetrante, por lo que la víctima logró sobrevivir al ataque sufrido con un periodo de recuperación de dicha lesión de 7 a 10 días".
Durante el procedimiento judicial, y advirtiéndose por parte del tribunal el derecho a guardar silencio del acusado, este prefirió declarar para dar su versión de lo ocurrido, señalando que en el lugar ya había un altercado entre la víctima y los guardias.
"El mencionado agredió a todos sin motivación alguna de manera tal que él se alejó pero la víctima, con un palo en la mano, gritó que iba a buscar un arma de fuego, y para precaverse de lo anterior tomó un arma cortante para evitar que la víctima llegara al arma de fuego", incluye el fallo sobre el actuar de Ortiz Díaz.
El condenado declaró que solía visitar el local, diariamente, para llevarle comida a un amigo suyo que trabajaba en el sitio como portero, y que generado el conflicto concurrió a una carnicería cercana de donde tomó dos cuchillos, entre ellos el empleado para el ilícito.
Con estos elementos la defensa pidió la absolución de su representado indicando que el mismo reaccionó ante una provocación por parte de la víctima, además informó que el acusado presenta estudios de kinesiología, por lo que sabía que los heridas infringidas no eran de carácter vital. La defensa pidió al tribunal considerar la legítima defensa dada la dinámica de los hechos.
Durante el juicio la Fiscalía exhibió un video donde se acreditó la dinámica del suceso, determinando tras análisis que el condenado ataca en al menos tres oportunidades al perjudicado de forma rápida, además se mostraron los cuchillos ensangrentados como evidencia material.
Si bien el tribunal condenó a Ortiz Díaz, sustituyó la pena impuesta por la de libertad vigilada intensiva.
3 puñaladas recibió la víctima en la vía pública, una de ellas penetró la clavícula.