Ciclista muere tras ser atropellado por soldado
Cabo segundo del Ejército quedó en prisión preventiva en regimiento militar. El alcotest aplicado al imputado arrojó 1,54 gramos de alcohol.
Un joven ciclista de 19 años de edad, identificado como Francisco Mesías Cortés, murió tras ser atropellado cuando se desplazaba en la avenida Arturo Prat de Iquique, específicamente a la altura de la intersección con calle José Miguel Carrera.
El joven iba acompañado de un segundo ciclista en dirección de sur a norte, y ambos fueros embestido por una camioneta, quien chocó contra Mesías Cortés, falleciendo en el sitio producto de las graves heridas.
La máquina era conducida por un cabo segundo del Ejército, quien desarrolla funciones en el campo militar de Pozo Almonte. La jueza Verónica Opazo prohibió la publicación del nombre del imputado y solo se puede entregar las iniciales de él (O.M.C.).
Formalización
De acuerdo a lo indicado por la Fiscalía en audiencia de control de detención, el soldado fue denunciado ante Carabineros por un superior, reseñado en el parte policial como el capitán Rebolledo, quien indicó a las autoridades en horas de la madrugada de ayer, la permanencia del sindicado en la villa militar de El Morro.
La fiscal Kárem Gómez explicó que el accidente ocurrió alrededor de las 23:30 horas en la costanera de Iquique, en momentos en que ambos vehículos viajaban en el mismo carril. Gómez indicó que "el ciclista fue colisionado por un vehículo Station Wagon conducido por el imputado, dándose a la fuga del lugar sin prestar ayuda a la víctima".
El Ministerio Público reveló que el soldado manejaba bajo los efectos de el alcohol "según la prueba respiratoria que dio como resultado 1,54 gramos de alcohol por litro en la sangre". Según palabras del propio funcionario acusado, también había tomado medicamentos para un tratamiento psicológico junto a las cervezas consumidas.
Gómez señaló además, de acuerdo al informe emitido por la Sección de Investigación de Accidentes de Tránsito (Siat), que el ciclista hizo un cambio de pista al momento de ser arrollado, y que la camioneta marca Ssangyong resultó afectada en un faro derecho, coincidente según el análisis con partes de micas levantadas en el sitio del suceso, sumado a las muestras de sangre tomadas del parachoque.
La fiscal también enfatizó, en que el soldado reconoce los hechos tras la existencia de publicaciones en redes sociales, que describieron su camioneta como la inmersa en el siniestro. Gómez solicitó para el señalado la prisión preventiva.
En contraparte el abogado defensor Eduardo Cabrera, se opuso a aquello y alegó, entre otras cosas, que su representado no recordaba haber participado en el accidente, apegando su tesis al informe pericial que daba cuenta de la maniobra del ciclista.
Finalmente la juez Verónica Opazo, estimó que se cumplían los presupuestos de la comisión del delito, y decretó la prisión por peligro de fuga. El cabo cumplirá la cautelar en regimiento militar.
El Ejército precisó la aplicación de medidas disciplinarias y administrativas contra el soldado, quien bajo el procedimiento arriesga sanciones graves o incluso la baja inmediata.