Preocupa excesivo consumo de alcohol en Tarapacá y costo fiscal asociado
Los últimos estudios en Población General y Escolar de Senda, han evidenciado que el consumo de alcohol está normalizado en el país. Sin ir más lejos, en Tarapacá estos informes arrojaron que en Tarapacá 4 de cada 10 personas adultas reconoce haber consumido alcohol en el último mes y el 72% de los estudiantes admite haber consumido alcohol alguna vez durante su vida.
Al igual que al resto del país, en esta región según el Informe Mundial de Situación sobre el Alcohol y Salud 2018 de la OMS, los chilenos consumen 9,3 litros de alcohol puro per cápita. Cifra por sobre el promedio del resto de los países de Latinoamérica.
El director regional de Senda, Claudio Jiménez, explicó "lamentablemente en el país el alcohol se concentra en un par de días, generalmente, viernes y sábado, a diferencia de otros países, donde puede ser el mismo consumo promedio semanal, pero distribuido a lo largo de los días. Según el estudio en Población General, en la región el 53,4% que consume alcohol, declaró que alcanzó un episodio de embriaguez en el último mes".
Explicó que en razón de esto es que Senda plantea la necesidad de cuantificar los costos para el país del consumo abusivo de alcohol y según un estudio realizado entre los años 2017 y 2018 por la Universidad Católica y la Universidad Adolfo Ibáñez que contó también con el apoyo de instituciones internacionales: la OMS, el Centro para las Adicciones y Salud Mental de Canadá (CAMH), la Sociedad Americana del Cáncer y la Universidad de Illinois en Chicago, se observa que en 2014, 36 personas fallecieron diariamente por causas relacionadas al consumo abusivo de alcohol en el país, es decir un, 13% de las muertes registradas ese año.
El estudio también muestra que el costo asociado al consumo riesgoso de alcohol, si se consideran aspectos de salud, productividad laboral, crimen y violencia, entre otros, es de 1.5 billones de pesos anuales. "Lo que el estudio calcula es el costo mínimo de las consecuencias negativas asociadas al nivel (cantidad) y patrón de consumo (intermitente excesivo) de alcohol que tienen los chilenos", explicó la doctora Paula Margozzini quien encabezó el equipo de trabajo para realizar este estudio.